Los últimos datos demográficos publicados ayer por el INE sitúan a Ourense como la segunda provincia de toda España con la edad media más elevada (50,67 años, en Zamora el dato es de 50,68), la segunda con la mayor tasa de defunciones por mil habitantes (15,36), también tras ese territorio castellano, así como la que mayor porcentaje de dependencia presenta a nivel nacional y la que tiene la ratio más baja de nacidos por cada mil defunciones: 313,77, cuando la media nacional es de 872,22, según el INE. En tiempos de pandemia, la crisis demográfica de Ourense, al menos desde el lado de los nacimientos, no ha empeorado. El Complexo Hospitalario Universitario de Ouresne (CHUO) registraba hasta ayer un total de 504 nacimientos, incluidos partos gemelares, lo que supone un aumento del 4,8% respecto a los 481 alumbramientos ocurridos en el mismo periodo de 2019.
Desde el 14 de marzo, cuando el Consejo de Ministros aprobó el estado de alarma, hasta el martes 5 de mayo, el hospital público de la ciudad había asistido 158 nacimientos, 39 más en lo que había transcurrido de 2020 hasta entonces, en Ourense, en comparación con ese mismo periodo de 2019.
La estadística publicada ayer por el INE cifra en un total de 1.468 los nacimientos registrados durante el año pasado en la provincia, 645 de ellos en la capital, donde reside un tercio de la población. La tasa global de fecundidad en Ourense es de 26,20 bebés por cada 1.000 mujeres, mientras que la media nacional es de 34,12. La ratio solo es inferior en Asturias (25,76) y Santa Cruz de Tenerife (25,55). La edad media de las madres avanza cada ejercicio y se sitúa en los 32,48 años, 31,54 en el caso de las primerizas.
