"Vivir en O Couto". Así se llama el vídeo que han elaborado, editado y publicado vecinos del barrio ourensano para recordar en un futuro la pandemia del coronavirus. El artífice es José Ramon Rodríguez. Él tiene licencia de dron y con el beneplácito de todos los vecinos filmados en sus ventanas o balcones pilotó el aparato para recoger los saludos, los bailes, los besos y los abrazos de sus -ahora- amigos tras el aplauso de las 20:00 horas.

"En realidad, los vecinos de mi comunidad nos llevamos muy bien y hemos hecho un grupo de whats app y a partir de ahí surgió la idea, todos se pusieron de acuerdo y nos involucramos todos. Uno puso la música, yo grabé y el resto les tocaba bailar o hacer lo que quisiera", explica José Ramón "Moncho".

El bruto se lo traspasó a María Prol, convecina de su comunidad y diseñadora de artes gráficas. "A mí si picas, tiro para delante", dice María. Recogió el producto entero y lo desgranó para ponerle música y cambiar los planes de diferente forma para que quedaron un vídeo a modo de recordatorio.

"Antes no les ponía cara a los vecinos de enfrente y fue al ver el vídeo cuando vi quién era el chico que ponía música y las demás caras", dice la vecina del barrio de O Couto.

"Moncho" va más allá: "Ahora hasta hacemos sorpresas de cumpleaños". Ambos elaboraron un vídeo que el final gustó a todos. Toda la comunidad puso su granito de arena para que el confinamiento sea llevadero. Las reuniones y charlas se hacen desde los balcones y ahora ya tienen más cosas que les unen. A parte de su barrio, de formar su propia comunidad -y el coronavirus-, también tendrán un documento que enseñar a futuras generaciones y recordar esta parte de la historia. Su participación no es otra forma de levantar testimonio de un confinamiento social que ya dura más de 40 días.