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Eva Mª Martínez - Magistrada

"Muchas empresas tendrán que entrar en concurso como balón de oxígeno"

La cancelación de vuelos por el estado de alarma deriva en centenares de reclamaciones

La magistrada Martínez Gallego teletrabajando. // FDV

Si la situación sanitaria lo permite -el Consejo General del Poder Judicial suspende todos los traslados mientras esté vigente el estado de alarma-, Eva María Martínez Gallego tiene previsto incorporarse en verano a su nuevo destino en el juzgado de Familia de Salamanca, tras ejercer como magistrada titular del juzgado de Primera Instancia 4 y Mercantil de Ourense desde marzo de 2011. Teletrabajando desde el domicilio, como el 70% de su juzgado, la jueza atiende la entrevista por correo electrónico.

- En su juzgado funciona el teletrabajo, pero al suspenderse juicios ¿qué impacto supondrá el parón para su sede?

- Cumplimos como los demás juzgados los mínimos presenciales diarios en la sede judicial, pero a mayores el 70% de este juzgado está teletrabajando desde sus domicilios, con sus propios equipos informáticos. Los compañeros y compañeras de la oficina se han volcado para sacar el trabajo adelante. Tenemos un grupo de Whatsapp que no para en todo el día, donde vamos avisando de que uno u otro procedimiento está para resolver, resuelto, para firma... La letrada de la administración de justicia está realizando una gran labor. Queremos tener todos los escritos tramitados, no solo los urgentes para que así, una vez se alce el estado de alarma, podamos estar en disposición de asumir el trabajo que va a llegar y que va a ser ingente no solo para nosotros sino para todos los juzgados.

- ¿Qué volumen de asuntos manejabais antes de la crisis y cómo cree que aumentará el retraso cuando se reanude la actividad?

- Las cifras no siempre se corresponden con el volumen de papel con el que se trabaja. Si tenemos una entrada de unos 1.400 procedimientos durante 2019, debemos sumar más de 8.000 escritos a los que se ha dado salida. Es un juzgado con una carga de trabajo inmensa pero cuya oficina trabaja con una gran dedicación y esfuerzo, no en vano en el último trimestre del año 2019 sacamos un 172% de trabajo. El retraso existe, sí, y al reanudarse la actividad se incrementará pero no por demorar la tramitación sino por el volumen de procedimientos que se avecinan.

- ¿Cómo prevé que impacte la crisis económica que se avecina en cuanto a concursos de empresas e incluso insolvencias personales?

- Estamos ante una crisis sanitaria que ha supuesto medidas excepcionales nunca vistas y que, por desgracia, implican ya una crisis económica importantísima. El Consejo general de Gestores Administrativos y el Registro de Economistas Forenses (Refor) del Consejo General de Economistas cifran en más de 50.000 las empresas que están ya hoy abocadas a concurso, y eso después de que en 2019 los concursos ascendieron a 4.000 en toda España. Ojalá no suceda pero vaticinan una avalancha de concurso, no solo de empresas sino de personas físicas.

Esta situación va a repercutir inevitablemente en el juzgado Mercantil de Ourense, que no es exclusivo pero sí excluyente en esta materia. En la actualidad tenemos en el juzgado 253 concursos de acreedores vivos hasta 2019, y en los dos primeros meses del año 2020 declaramos otros 11, incrementando el porcentaje de otros años. Además de tramitar no solo cuestiones de carácter civil, como el resto de mis compañeros de Primera Instancia que soportan también una elevada carga de trabajo, sino con las cientos de reclamaciones por cancelaciones de vuelos durante el estado de alarma que tramitamos en exclusiva en toda la provincia.

Así que el escenario que se presenta es abrumador. Muchas empresas y pymes de nuestra provincia no van a poder soportar el cierre total de su negocio durante mucho tiempo y tendrán que acudir al procedimiento concursal, no para la liquidación de su empresa, sino para intentar una refinanciación de deuda, un convenio con sus acreedores para obtener un balón de oxígeno con quitas en la deuda y esperas en el pago. Es importante cambiar la idea de que estar en concurso implica estar en liquidación, nada más lejos de la realidad. Es posible que una empresa utilizando adecuadamente el concurso pueda salir reforzada y continuar con su actividad. Todo ello dependerá de si llegan o no demasiado tarde al mismo.

Respecto a que las empresas puedan ir a liquidación por un retraso en la tramitación creo que no será así, sucederá por su situación coyuntural no por una demora en la tramitación del procedimiento. Además, conscientes de que detrás de cada empresa hay familias de trabajadores o proveedores que no cobran, el juzgado Mercantil de Ourense siempre ha dado prioridad a la tramitación de este tipo de procedimientos, y los profesionales de la ciudad siempre lo han comprendido respondiendo con absoluta responsabilidad.

- ¿Considera que los asuntos que deberían tramitarse por videoconferencia, como audiencias previas, podrían empezar a celebrarse sin perjuicio de que el juicio o la vista pudiera quedar pospuesta?

-En este momento es cuando más valoramos las nuevas tecnologías que llegaron a los juzgados en los últimos años y que han venido para quedarse. Creo que todo lo que pueda ser tramitado por videoconferencia debería hacerse así. Debemos evitar someter a los profesionales y a los ciudadanos a riesgos innecesarios cuando sea posible, al margen de que se puedan establecer medios de protección que van a ser necesarios durante un tiempo. Hay actuaciones que pueden ir realizándose con seguridad para todos. También tengo que decir que deberían estar implementándose ya medidas de protección para las oficinas, como algún tipo de mampara o una forma de separación entre las mesas de los funcionarios. Debemos proteger a quienes van a tramitar los problemas de muchos ciudadanos.

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