El juez de Instrucción 1 de Ourense, Leonardo Álvarez, ratifica la prisión provisional de C. P. P., un hombre de 35 años encarcelado desde septiembre por arrollar presuntamente a un motorista de 37 que perdió la vida en la N-525, a la altura de Rabo de Galo. El magistrado ve indicios de homicidio con dolo eventual, no imprudente -solo por este delito se enfrentaría a una petición de condena de entre 10 y 15 años de cárcel- así como omisión de socorro y dos delitos viales, porque si era él quien conducía -como sostiene la investigación- lo hacía pese a carecer de permiso y tras consumir alcohol y drogas. Presuntamente iba a 125 por hora en un tramo de 60. Su defensa pidió su libertad apelando a resoluciones de organismos internacionales que aconsejan la excarcelación de presos vulnerables. La letrada aducía que el investigado padece un déficit proteico por causa congénita, un tipo de enfermedad rara.

La OMS y el Comité para la Prevención de la Tortura del Consejo de Europa recomiendan alternativas a la privación de libertad durante la crisis sanitaria. La Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, instó a las autoridades a excarcelar a los presos vulnerables por edad, enfermedades o adicciones graves.

La Fiscalía se opuso a la petición de la letrada en este caso. El magistrado considera que sigue existiendo riesgo de fuga para mantener entre rejas al investigado. "Aun dando por bueno" el diagnóstico que esgrime la abogada -propuso que el juzgado pidiera al Sergas que informara sobre la dolencia-, "y aun admitiendo el alto grado de contagio de coronavirus que está asolando nuestro país", el juez subraya que "no se ha acreditado que concurra algún tipo de circunstancia en el interior del centro penitenciario" en el que está el imputado -el de Pereiro de Aguiar- "que lleve a pensar que existe un riesgo de contagio mayor que aquel al que se enfrentaría si estuviese en libertad".

El magistrado reitera que "al no detectarse ningún contagio en el interior del centro penitenciario y no apreciarse un riesgo de contagio" para el presunto autor del atropello "que se podría ver agravado con la patología que dice padecer, no procede atender a la petición de libertad, dado que no hay razones para pensar que estando en su domicilio el riesgo de contagio se reduciría". A mayores, Álvarez destaca que "los internos están sometidos en un centro penitenciario a control médico, lo que a su vez incluso es más beneficioso para el investigado". El auto, de fecha 31 de marzo, no es firme. Cabe recurso.

Declaran testigos en la causa

Este lunes, se practicaron en el juzgado de Instrucción 1 de Ourense, de forma presencial, tres testificales a petición de las defensa del conductor y de su prima, J. P., alias Pucha, investigada por presunto encubrimiento. La abogada del principal acusado alega que él no conducía el coche, sino el copiloto, y considera que este al menos debería ser investigado por omisión del deber de socorro. Además considera que los hechos son un delito de tráfico, no un homicidio con dolo eventual como ha concluido el juez instructor. La letrada asegura que dos forenses consideraron que fue un accidente.