El alcalde lo tiene claro: ayudas directas y sin perder tiempo, porque las crisis no sabe,n dice, de burocracia. "El mejor trámite burocrático es el que no se hace", insiste Jácome, que considera que en estos momentos "no podemos ponernos a examinar con lupa la situación de los más de 9.000 autónomos que hay en la ciudad".

Señala que esta decisión fue comunicada previamente a los integrantes del grupo de gobierno, se está analizando con los técnicos municipales con el objetivo de "minimizar al máximo la tramitación burocrática, pues de lo que se trata es de que llegue lo antes posible". Pérez Jácome insistió en que "fuimos el ayuntamiento de España que puso encima de la mesa la mayor respuesta presupuestaria, dentro de nuestras posibilidades, para intentar paliar una situación que se agrava con la ampliación del estado de alerta decretado por el Gobierno". Toda vez que los técnicos municipales concreten el proceso, cerrando el ejercicio económico de 2019, se fijará la cuantía económica de ayudas lineales.

Ya en sus redes sociales señaló que se trata de no perder tiempo, de ahí las ayudas lineales y directas "sin apenas papeleo ni condicionantes. En ocasiones como estas el dinero no debe estar en los bancos, sino en el bolsillo de aquellos que más golpes se están llevando en este histórico episodio que vivimos. Las condiciones de solicitud se informarán después del 13 de abril", explica el regidor.

En efecto, y como ya anunció en su momento la concejala de Economía y Hacienda Ana Morenza, los técnicos están trabajando con toda la agilidad posible, para poder pagar a proveedores y realizar todos los trámites oportunos para poder aprobar la liquidación de cuentas de 2019. Sin esta operación no será factible recurrir al remanente de crédito para obtener esos veinte millones de euros que se van a destinar a esas ayudas directas. En otros concellos como el de Valencia, la aportación destinada a estos fines, en su caso inicialmente 5,3 millones para pymes y comercio, ya están decididas y el reparto previsto allí es a razón de 3.000 euros para el pequeño comercio y 7.000 para pymes.