Mañana se cumplen dos semanas desde la declaración del estado de alarma que establece un confinamiento para la mayoría de la población, con salidas justificadas para trabajar o actividades esenciales, con el objetivo de frenar la curva de expansión del virus, que hasta ayer había provocado el fallecimiento de más de 4.000 personas en toda España. Las autoridades temen que, tras casi 14 días de reclusión en casa y una previsión de buen tiempo -sol y máximas de 20 grados en Ourense-, puedan repuntar los desplazamientos a segundas residencias este fin de semana, en especial al medio rural, donde se concentra la población envejecida, un colectivo de riesgo. La Policía Nacional y la Policía Local en la ciudad, así como la Guardia Civil en su demarcación, intensificarán los controles para evitarlo.

Fuentes de la comisaría de Ourense informaban ayer de que, a primera hora de hoy viernes, mandos de Policía Local y Nacional han mantenido una reunión para diseñar los operativos de vigilancia, estableciendo las ubicaciones así como las horas. Los dispositivos de control conjunto consistirán en tres "cierres", es decir, operativos en las entradas y salidas de la ciudad.

Cada uno de estos puntos de verificación estará compuesto por tres vehículos oficiales. Los agentes de los dos cuerpos de seguridad cooperan identificando a los ocupantes de los vehículos y solicitando una justificación a su viaje. Sin causa prevista serán multados. A mayores, aclara la comisaría, se mantendrán los controles de patrullas en coche y a pie por la ciudad, como cada jornada desde que el sábado 14 de marzo se decretó el estado de alarma por la pandemia del Covid-19.