Las fuerzas de seguridad recomiendan ir al supermercado más próximo de casa para hacer la compra, en cumplimiento de las directrices establecidas para los ciudadanos durante el estado de alarma, para lo que están realizando las advertencias necesarias. De momento los agentes no han realizado denuncias, cuando el ciudadano atiende sus instrucciones y muestra un carácter colaborador, pero advierten de que "en cualquier momento pueden llegar las sanciones".

En líneas generales, los agentes de las fuerzas de seguridad requieren que exista "una causa justificada", cuando un ciudadano se desplaza desde la ciudad a las afueras, para visitar un hipermercado u otros establecimientos que se encuentran muy próximos, en el concello limítrofe de Barbadás. Y ponen como ejemplo, la adquisición de un frigorífico, en caso de avería, o que una persona vegana o celíaca tenga que comprar algunos productos que no encuentra en las tiendas más pequeñas.

La Policía Local de Ourense es la que se muestra más restrictiva. Avisa de que realizará denuncias, en los casos que la persona que está realizando el desplazamiento no tenga "una causa justificada". En el transcurso de una consulta, indicó a una persona que preguntaba si podía hacer la compra en Lydel, "como la hacía siempre", y la respuesta fue negativa, por "falta de causa justificada". También aclara que las personas que residen en "un lugar distante, como la rúa Emilia Pardo Bazán, no pueden llevar al perro al parque canino de Salesianos. Tienen que pasearlo al lado de su casa. La gente no puede recorrer dos kilómetros para hacer la compra. Eso no tiene sentido". Además de aclarar que "debe hacerlo en el mínimo tiempo posible. Si yo veo que está paseando el perro y al cabo de una hora compruebo que usted todavía continúa en la calle, lo voy a denunciar. Y si sale seis veces de casa para comprar seis barras de pan, también lo voy a sancionar. La gente no puede estar en la calle de forma permanente, saltándose el estado de alarma".

La Policía Nacional y la Guardia Civil están realizando advertencias para pedir que no se hagan las compras en un lugar distante de casa.