La preocupación es absoluta en el sector sociosanitario de Ourense, donde hay 83 residencias de mayores y más de 5.100 plazas. La Fundación San Rosendo gestiona 33 centros de mayores con 2.122 usuarios y aunque sus necesidades actuales están cubiertas reclaman material de protección para abordar situaciones críticas que podrían sobrevenir en cualquier momento dada la escalda de la curva de positivos en la provincia.

Desde la fundación piden Equipos de Protección Individual, formado por bata desechable, mascarilla, gafas y guantes, necesarios para garantizar la seguridad del personal en el cuidado de los internos que registren positivos. Una situación que podría producirse en cualquier momento dada la gravedad de la situación.

La cifra de positivos se dispara con mayor facilidad en estos centros donde conviven grandes grupos de personas y el contacto entre ellas es frecuente.