Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

La otra realidad de la sociedad ourensana

El 70% de las personas "sin hogar" en las calles de la ciudad en 2019 son españolas

El 80% son hombres y el 20% mujeres - El porcentaje de inmigrantes es una minoría que roza el 30% -El 46, 5% fueron víctimas de algún delito, de los cuales siete de cada diez no presentaron ninguna denuncia

Una persona pidiendo a la salida de la iglesia de Santa Eufemia. // Carlos Peteiro

Vivir en la calle no es una decisión personal. Es una opción vital que obedece a unas circunstancias económicas, sociales e individuales de un momento determinado. La memoria de Cruz Roja del 2019 determina que el 70% de las personas atendidas en una situación de calle en la ciudad de Ourense son de origen español. Una radiografía que se aleja de la instaurada en la sociedad y así lo describen los técnicos y profesionales del programa SenFogarismo de la entidad social, que financia la Xunta de Galicia. El porcentaje de inmigrantes que viven en una situación de calle roza el 30%.

Durante el pasado ejercicio, los trabajadores de Cruz Roja atendieron a un total de 307 personas "sin hogar", de las cuales 114 fueron atendidas en la calle. Diego e Isis Sanmartín, dos de los trabajadores del programa, profundizan en una situación que califican de "temporal" y realizan la fotografía del perfil de la persona en situación de calle. Diego lleva desde el nacimiento del programa en 2003 abre la matrioshka de la estadística: "Existe un porcentaje de hombres del 80% y de un 20% de mujeres. El pasado año de las 307 personas atendidas en la situación de calle, tanto en calle como en las dependencias de la Cruz Roja en Ourense, las mujeres fueron 61 y los hombres un total de 246. El perfil de persona en situación de calle es un hombre de unos 40 años. Aunque estos últimos años nos estamos encontrando un aumento de los extremos, nos encontramos con más jóvenes, es decir del grupo de edad entre 18 y 25 años y también de los más mayores, la media sigue siendo la misma, lo que es la foto de la persona ahora es más variada, antes era el hombre de 40 años". Y añade: "Al principio del proyecto el porcentaje de mujeres era de un 15%, pero en los últimos años ha aumentado hasta el 20%".

Isis completa la explicación: "Ellas son las que viven en una situción de más vulnerabilidad y son la que están peor". Y añade: "desde antes de verano de 2019 hasta estos primeros meses si que es cierto que estamos atendiendo a más personas, pero puede deberse a muchos factores como la concentración en un lugar o otro tipo de circunstancias. Pero lo cierto es que pasamos de atender en situación de calle a unas diez personas a casi 20 en la misma noche".

El programa de atención a personas sin hogar tiene varias líneas de intervención. Una de ellas, es la atención en la calle en la que los profesionales salen con la Unidad de Emergencias Sociales para tratar de mantener un contacto con las personas en situación de calle. Isis explica que "nosotros salimos con la furgoneta donde llevamos café, mantas y otras cosas. Es importante el contacto sin invadir el espacio personal donde están ya sea un cajero u otro sitio". Diego añade que "primero le ofreces un café y es una primera toma de contacto, si después te dice que tiene frío, le dices que tienes una manta y vas formando un vínculo con el que coger confianza".

Otra de las líneas de intervención son las actuaciones en las dependencias de Cruz Roja donde los técnicos y profesionales reparten información de diferente índole, así como kits de primeras necesidades: "Con algunos mantenemos un contacto y vienen hasta la oficina para que les demos una atención básica". Isis explica otra forma de intervención: "También existen los acompañamientos, pero esta forma de intervención se hace cuando tienes un contacto con la persona, porque necesita ir al médico o al banco, o cualquier tipo de circunstancia". También quieren dejar una cosa clara. Diego alega "nosotros no sacamos a nadie de la calle, nosotros trabajamos para buscar una solución a esa situación, es decir, nosotros ayudamos a salir de esa situación de calle". Isis también aclara que "una persona sin hogar, no es una persona sin techo. Una persona sin hogar puede estar viviendo en una habitación, que es un techo, pero no es un hogar. No es lo mismo personas sin hogar que personas sin techo, es necesario hacer esa distinción".

El programa también involucra a los voluntarios que el pasado año fueron un total de 24 y que "son fundamentales". Los técnicos y profesionales advierten que "existen personas que viven a las afueras de la ciudad en casas abandonas y es difícil tener un registro e intervenir en esas situaciones".

Compartir el artículo

stats