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"¡Que vivan las comadres!"

Los escolares de la ciudad celebraron una fiesta marcada por la tradición que continuó en diferentes puntos de la provincia

Un niño corre ante la presencia de tres niñas en la Plaza Mayor. // Brais Lorenzo

El frío encogía a la Plaza Mayor con el calor escolar esperando en las escalinatas del Concello de Ourense ayer por la mañana para prepararse para la segunda contienda del entroido escolar en Ourense. Primero fueron los compadres, donde los niños descompusieron las obras de tela y periódico que realizaron las niñas, sobreviendo tres composiciones.

Ayer, los menores del centro educativo Mestre Vide, Amadeo Rodríguez Barroso e Irmáns Villar se postularon a ambos lado de la plaza para esperar la "campanada" de inicio de la fiesta. Antes bailaron al ritmo del reguetón y calentaron los músculos para sprinter. Sonó el "tres" y las carreras se sucedieron, con las exhalaciones que marcaba el baho.

Ellas recorrieron metros y metros para arrancar las comadres de la mano de ellos. Alguna quedó intacta, otras sin cabeza, las que más sin tela que lucir y la fría piedra era testigo del éxito femenino en la contienda. Lo hicieron por turnos, primeros unos menores y después los otros dos centros educativos. Todo ello, mientras los operarios preparaban e instalaba las luces y el panel de "salida" para albergar las orquestas del fin de semana y los bailes del entroido.

Una mañana a la carrera que terminó con una fiesta que se alargaba durante la tarde en diferentes puntos de la ciudad y de la provincia, donde se preparaban para la celebración de las cenas de comadres y la prolongación de la fiesta durante la madrugada.

El Liceo de Ourense acogió ayer por la noche una cena donde decenas de mujeres se engalonaron con sus mejores galas para celebrar la tradicional fiesta. Baile, risas y diversión para pasar una noche (y madrugada) con música y jarana.

Verín fue ayer por la noche el apicentro de la fiesta donde se congregaron personas de diferentes puntos de la geogragía española y portuguesa para celebrar la noche más esperada del entroido verinense. En la capital de la comarca de Monterrei también tuvo lugar ayer el desfile infantil donde recorrió las principales calles de la villa, coloreando y bailando al ritmo de la música y siendo el preámbulo de una noche única en Verín.

El jueves de comadres también se celebró la pasad noche en las localidades de Laza, Entrimo, Manzaneda, A Pobra de Trives, Ribadavia, A Veiga, Viana do Bolo y Vilardevós. Ayer fue el primer día de un fin de semana donde la provincia respirará fiesta y las miradas se esconderán bajo las máscaras tradicionales.

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