Un hombre de 27 años, con formación en incendios -cursó un ciclo superior sobre el sector forestal- está acusado de un presunto delito de incendio imprudente por efectuar una quema de restos agrícolas y forestales en una finca del municipio de San Amaro, prendiendo fuego "con omisión de las más elementales normas de cuidado", según la Fiscalía, que pide una condena de un año de prisión y una multa de 2.160 euros.

Presuntamente, el encausado no efectuó la franja de protección necesaria y no se cercioró de que la hoguera estaban bien apagada. El fuego se reprodujo la tarde del 15 de mayo de 2018. Las condiciones meteorológicas eran propicias para la propagación de las llamas: 27,4 grados de temperatura, una humedad del 35%, viento y un índice de riesgo de incendio alto.

El fuego se propagó a las fincas colindantes y afectó a una superficie de 0,07 hectáreas de monte raso. El coste del operativo de extinción fue de casi 1.200 euros. El juicio se celebra en marzo.

Caso de una septuagenaria

También quedó pospuesto ayer, hasta ese mes, otra vista contra una mujer de 73 años acusada de un incendio imprudente de 0,55 hectáreas, originado por una quema descuidada de restos agrícolas en O Irixo. Ocurrió igualmente en mayo de 2018, en una jornada con riesgo alto de incendio forestal (la temperatura rozó los 30 grados). La Fiscalía pide la misma pena que en el caso anterior. El fuego afectó árboles de 30 años, causando daños de 2.170 euros.