El servicio de disciplina urbanística del Concello de Ourense tramitó desde 2015 un total de 404 expedientes para requerir a los propietarios de inmuebles de la ciudad la ejecución de obras de reparación por el mal estado de sus edificaciones y evitar que los daños materiales puedan derivar en problemas de seguridad para los propios inquilinos o los ciudadanos en general.
Entre 2015 y 2018 se incoaron una media de 75 órdenes anuales, a un ritmo estable, pero el pasado año la cifra se disparó un 23%, alcanzando los 102 expedientes cerrados con requerimientos directos de ejecución.
La vigilancia que se realiza desde el departamento de urbanismo también se centra en el cumplimiento de la normativa y en esta materia se tramitaron 844 expedientes de reposición de la legalidad urbanística por obras que se desarrollaron sin licencia o que no se ajustaron a la autorización municipal. En este ámbito, el número de requerimientos también aumentó en 2019 al pasar de los 153 del año anterior a 183.
Ninguna ruina en 2019
Mientras las advertencias a los propietarios por incumplimientos o por el mal estado de conservación de los inmuebles aumentaron el pasado ejercicio, los expedientes de declaración de ruina que afectan fundamentalmente al casco histórico de la ciudad, se han ido reduciendo desde 2015 hasta el punto de que el pasado año no se abrió ninguno.
Con todo, en los últimos cinco años el servicio de Urbanismo puso en marcha un total de 19 expedientes de esta naturaleza, de los cuales nueve todavía se encuentran en tramitación, uno caducó y otro fue desestimado. Cinco de los edificios afectados han sido declarados en ruina, lo que implica su demolición o la ejecución de obras fijando plazos que, en caso de incumplimiento, pueden derivar en órdenes de ejecución forzosa.
La función de vigilancia que realiza el Concello se complementa, desde 2012, con la obligatoriedad de los propietarios de realizar una inspección periódica de las edificaciones para determinar su estado de conservación, la conocida como Inspección Técnica de Edificios, ITE.
Desde entonces, el Concello de Ourense publica anualmente el padrón de edificios que deberán someterse ese año a la inspección obligatoria. Los más antiguos han pasado ya ese filtro y durante el actual ejercicio son las construcciones de 1989 las que se someterán a revisión para analizar su estado de conservación. Estos informes determinarán si existen deficiencias que deban ser subsanadas. Son un total de 185 edificios con 30 años de antigüedad.
El padrón completo puede consultarse en las oficinas administrativas de la Inspección Técnica de Edificaciones (ITE), situadas en la calle García Mosquera, 19 y en la página web del Concello de Ourense. Desde las oficinas municipales recuerdan que la exposición al público de este padrón tiene la consideración de notificación para los propietarios. No realizarla implica una infracción urbanística que conlleva sanción.
