El presidente del Consejo Gallego de Colegios Médicos, José Luis Jiménez, propone como fórmula para paliar la falta de facultativos en varias especialidades, en el conjunto del estado español, que estos dejen de desempeñar funciones administrativas, con lo que podrían dedicar más tiempo y mayor atención a las tareas que les corresponden. Las carencias más relevantes se registran en atención primaria, anestesia, neurología, psicología y en pediatría, que ha supuesto el cierre del paritorio de Verín, por la falta de candidatos para cubrir dos plazas, en la primera convocatoria realizada por el Sergas.
Con la finalidad de paliar la situación Jiménez se muestra partidario de "empezar a repartir funciones". Advierte que los médicos "están asumiendo en España muchas funciones que pueden desarrollar los administrativos, enfermeros y psicólogos, además de arreglar los problemas sociales. Hay muchas cosas que modificar, para hacer sostenible el modelo".
Destaca que lo que quiere el paciente del médico es que se siente con él, que lo escuche y que se haga cargo de sus problemas, "pero eso necesita tiempo, por lo que tendríamos que evitar las funciones administrativas, para poder centrarnos en la tarea que nos corresponde".
El presidente de los médicos gallegos considera que "con una buena atención médica, se puede ahorrar muchísimo". Y agrega: "Si no puede atender bien al paciente, tiene que pedir pruebas, porque no le da tiempo a hablar con él, y tiene que ponerle más medicinas? Si tuviera más tiempo, probablemente se podrían resolver los problemas con los que estamos".
Jiménez explica que la falta de médicos en varias especialidades se debe a una mala planificación y a la desproporción existente entre los dispositivos abiertos en España, el modelo español y la gestión de recursos humanos. "Hay una desproporción absoluta, desde hace muchos años, entre el número de médicos y el de dispositivos", subraya. Y, en ese sentido, aclara: "No tenemos menos médicos que el resto de Europa, pero tenemos muchos más dispositivos. Tenemos que atenderlos todos. Mientras no los cierren, no conseguiremos llegar a todas partes".
Portugal también presenta un déficit de médicos, pero en la actualidad ya no está realizando fichajes entre los profesionales gallegos, porque la diferencia de salarios se ha reducido. El país luso requiere menos recursos humanos, porque el modelo es diferente.
Jiménez aclara que la sanidad gallega y española presentan déficit, "en función de lo que hay que cubrir, porque los modelos pueden cambiar. Se puede implantar otra forma de organización, que igual necesita menos médicos, pero la que tenemos ahora necesita muchos médicos y no los tenemos".
Contempla la atención a domicilio como "una modalidad muy importante, para tratar en su domicilio a los pacientes crónicos", pero advierte de que "eso también va a necesitar médicos".
El déficit de especialistas se produce en todas las comunidades autónomas, pero hay diferencias. "El País Vasco va un poquito por encima, en algunas cosas Asturias y en otras Cataluña. Galicia no es que vaya mucho peor, se están haciendo cosas, dándole vueltas a todo esto, pero claro, queda mucho que hacer", apunta Jiménez. En líneas generales, admite que "el sistema nacional de salud está un poquito en crisis y tiene que repensarse ahora", mediante el reparto de tareas y haciendo una planificación. Durante estos años, no se ha realizado una planificación sobre los médicos que eran necesarios en cada una de las especialidades. Se actuó pensando en el presupuesto de cada año, sin previsión sobre lo que podía ocurrir en los siguientes".
De todas formas, Jiménez reconoce que "tenemos una gran sanidad, pero está en un momento en el que tiene que tomar decisiones potentes".
