Poco antes de las 7 de la mañana, un guardia civil de paisano era el único cliente en el bar Lateral 21 de la calle Río Camba, en el barrio ourensano de O Vinteún. De repente lo sobresaltó el grito del hostelero, Faustino. "Cuando me giré vi un bulto y ya me di cuenta de que era un hombre agachado", detrás de la barra. Presuntamente quería llevarse la hucha de las propinas, con 500 euros. Tras identificarse como integrante de la Guardia Civil, el agente lo sujetó, le indicó que esperara a la llegada de la Policía Local, le impidió que se diera a la fuga y lo redujo en el suelo, pese a la resistencia del individuo, de 30 años y con varios antecedentes policiales por hechos similares. "En ningún momento cejó en su intento de huir", según el instituto armado. El guardia sufrió lesiones leves a consecuencia del forcejeo. El hostelero afirma que es el mismo ladrón que, el domingo, ya quiso sustraer el bote y se llevó el móvil de una camarera. "Cuando fui a denunciar a las 8 de la mañana, un policía me dijo que ya lo habían soltado".
Aunque la Guardia Civil de Tráfico -el agente es del GIAT del Subsector de Ourense- afirmó primero que el hombre fue detenido, la Policía Local aclaró que su traslado a dependencias oficiales fue con la intención de identificarlo, ya que en el bar no dijo quién era. Con todo, antes de ser puesto en libertad se tramitó una denuncia que llegará al juzgado.
Actúa al descuido
"El domingo también entró al descuido. Se largó con el móvil de una camarera y además intentó coger el bote de los donativos para el Domund", asegura el dueño del establecimiento. Cuando María, una de las empleadas, llegó ayer por la mañana al establecimiento, el guardia civil y el hostelero se aseguraban de que el presunto ladrón se quedara retenido. La trabajadora llamó a la Policía. Tres patrullas del cuerpo municipal de seguridad se personaron en el bar de la calle Río Camba y, tras el intento en vano de identificación del joven, se lo llevaron para comprobar sus datos.
El incremento de los hurtos
Los hurtos son el delito que más se comete. En la provincia hubo 1.260 casos de enero a septiembre de este año, según el Ministerio del Interior. Un total de 834 fueron cometidos en la ciudad durante ese periodo, lo que supone un 3,2% más que un año antes. Estos delitos contra el patrimonio aumentaron al igual que los atracos (un 2,1% más) y, sobre todo, los robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones (+24,4%).
