La polémica por la decisión del Sergas de cerrar el paritorio y las urgencias pediátricas del hospital de Verín continúa viva. Hoy, el brazo gallego de la Marcha Mundial de las Mujeres ha convocado manifestaciones en toda Galicia para mañana con un llamamiento al feminismo gallego a responder lo que consideran una "agresión institucional" a las mujeres de esa comarca ourensana.

En la propia Verín, la concentración será este miércoles a las 20:00 delante del hospital, en Vigo, a la misma hora, en el Marco y en Ourense capital en la Subdelegación del Gobierno, también a las 20:00. También están convocados actos reivindicativos en Allariz, Celanova, O Carballiño, Santiago, A Coruña, As Pontes, Betanzos, Lugo y Monforte.

Mientras se organizan estas medidas de protesta, que coinciden con el cierre en el propio centro hospitalario, el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, mantiene el aval a la decisión de cerrar el paritorio de Verín y se ha reafirmado en que el paso se da por razones de "seguridad" y atendiendo al criterio de los profesionales sanitarios del área. "Si los médicos nos mandan, nosotros obedecemos", ha proclamado.

"Razones de seguridad"

En declaraciones a los medios, Feijóo ha defendido que, al igual que el jefe de Pediatría del área de salud de Ourense, el jefe del servicio de Obstetricia se ha pronunciado "por distintos canales y medios" de forma reiterada para "decir muy claramente" que "por razones de seguridad" recomienda que los partos "no se atiendan en ese hospital".

"Que las consultas ordinarias de ginecología para mujeres que estén o no embarazadas, las previas y posteriores al embarazo, se sigan haciendo en Verín, pero el acto concreto del parto propone que se haga en el paritorio de Ourense", ha subrayado, antes de proclamar que, a su juicio, "los médicos saben más que los políticos".

"Y cuando un político no quiere escuchar las propuestas de los médicos, ese político está jugando con la sanidad. Y creo que jugar con la salud y seguridad de las embarazadas y sus bebés es algo que un político no tiene legitimidad para hacer", ha advertido.