Todos los caminos llevan a Roma, dice el refranero, y eso es lo que debió pensar el GPS instalado en un camión de nacionalidad rumana que desde las ocho de la tarde del martes vive en un auténtico culebrón en una pista forestal en el término municipal de Castro do Val, Ourense.

De acuerdo con el relato del destacamento de la Guardia Civil de Tráfico de Verín, el calvario del conductor rumano arrancó cuando decidió hacerle caso a su guía electrónico en su camino de regreso a Italia después de descargar material en las obras del AVE en A Gudiña.

Sin ser consciente de que transitaba por una carretera sin denominación, recorrió más de dos kilómetros siguiendo las instrucciones del GPS, el chófer del tráiler vivió la primera parada de su vía crucis cuando, en una tajea, se quedaba sin tres de los neumáticos del lado izquierdo del semirremolque.

Allí, el camión averiado que ocupaba todo el camino (si bien es cierto que era una vía que actualmente se usa para dar servicio a las obras del AVE en la provincia) recibió la asistencia de los GES de Laza y A Gudiña así como de dos motoristas de la Guardia Civil de Tráfico.

Horas después, tras cambiarle los tres neumáticos, el aventurero conductor reinicia su camino hacia Italia. No durararía mucho esta etapa, pues poco después el tráiler embarrancaba a la entrada de Campobecerros, una aldea de 125 habitantes que forma parte de la ruta del Camino de Santiago.

Ahora, en lugar de una operación para completar el cambio de ruedas, se requiere la asistencia de una grúa de gran tonelaje que no llegará hasta el jueves y lo recoloque, de nuevo, en el camino. Será entonces cuando el camionero emprenda su viaje hacia Italia.

Lo hará tras pasar la noche en la cabina del vehículo y después de recibir la visita de Protecció Civil de Laza para interesarse por su estado y para saber si necesita alguna cosa, no obstante, está muy cerca de la población. Será el jueves cuando despierte y recuerde este viaje que se suma a la lista de las 'jugarretas' del GPS en Galicia.