La provincia pierde población a cuenta gotas y el apellido "vaciado" se añade a Ourense con la misma tesitura que el mundo rural español pierde atractivo demográfico, oportunidades laborales y sobrecarga la explotación de sus recursos naturales.

Sin embargo, en esa línea de deterioro de una provincia envejecida y donde una generación de jóvenes están dispersos por el territorio nacional y el viejo continente, hay una "Galia" ourensana que gana población.

Los datos del Instituto Nacional de Estadística determinan que Allariz es la única villa de la provincia de Ourense que aumenta su padrón municipal desde los tiempos de la crisis.

En el año 2008, la villa alaricana registraba un padrón municipal de 5.690 personas siendo la penúltima villa de la provincia en número de censados por concello. Por delante, se situaban en primer lugar el Barco de Valdeorras con 14.040, O Carballiño era la segunda con 13.983, le seguía Xinzo con 10.033 y Celanova con 6.075.

La recesión económica se instaló en el sistema y el padrón de las villas se resintió hasta cambiar la importancia demográfica de algunas, menos de Allariz. La tendencia de la villa ha fluctuado en los años poscrisis, aumentando y disminuyendo de forma alternativa, hasta hace dos años. Desde 2016, el padrón municipal alaricano experimentó dos incrementos y alcanzó la máxima cifra de y vecinos desde que hay registros en el organismo de estadística. Una radiografía demográfica que contrasta con la situación de las demás villas de la provincia.

Sorpasso de O Carballiño

El Barco de Valdeorras era la principal villa en 2008 con un padrón municipal de 14.040 y fue la que más censo perdió (casi 600 personas)hasta descender a 13.463. Una cifra inferior a las personas censadas actualmente en O Carballiño que tiene 13.939, frente a los 13.983 que registraba hace diez años. Allariz es la cuarta villa más importante en cuanto a datos demográficos, por detrás de Carballiño, Barco de Valdeorras, y Xinzo.

La población de Ribadavia desciende en más de 350 personas en diez años y la de Celanova en medio millar, en el mismo periodo.