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Los delitos informáticos, la "principal debilidad": 400 este año, un 35% más

- Estas infracciones, la mayoría estafas, suponen más del 8% del total de la criminalidad -Caen más de un 25% los robos en viviendas y la cifra global de delitos mejora a 2018

El coronel de la Comandancia, ayer, en su último Pilar como jefe provincial de la Guardia Civil. // Carlos Peteiro

Se cometen a golpe de clic, a ciento o incluso miles de kilómetros de la víctima y el esclarecimiento es complejo. Es la nueva realidad criminal a la que se enfrentan las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado a diario. Es "nuestra principal debilidad", reconoce el coronel jefe interino de la Comandancia de la Guardia Civil de Ourense, Manuel Javier Novo. El número de delitos registrados en lo que va de año en la demarcación del instituto armado -91 de los 92 concellos de Ourense, todos salvo la capital- es ligeramente inferior a los de 2018 y la tasa de criminalidad, una de las más bajas de España. Pero casi uno de cada diez infracciones son debidas ya a la delincuencia informática. En lo que va de año, la Guardia Civil de Ourense ha recibido unas 400 denuncias, sobre todo en la vertiente de estafas electrónicas. "Es un notable aumento del 35%", dice Novo.

El instituto armado investiga todo "pero es imprescindible que el ciudadano actúe con prudencia y se conciencie del peligro potencial que entraña el uso de las nuevas tecnologías sin tener un mínimo conocimiento de las mismas, y sin las necesarias garantías que identifiquen a los operadores con los que se contratan las compras o los servicios". Aunque no es una mayoría, algunas de estas denuncias recurrentes son falsas. "No hace otra cosa que engrosar la estadística pero, normalmente por el desconocimiento técnico de los propios infractores, que no suelen ser delincuentes experimentados, se llega a la relativamente fácil resolución de las incidencias", avisa el jefe provincial de la Guardia Civil.

Al margen de esta nueva realidad delictiva, varias infracciones caen en la demarcación del instituto armado, el rural ourensano: los delitos contra las personas, las agresiones sexuales y, sobre todo, los robos con fuerza en establecimientos y en vivienda. Esta última modalidad cae un 25%.

La Guardia Civil de Ourense presenta un índice de esclarecimiento del 50% y, en el último año, consiguió importantes éxitos: 31 detenidos en la operación Justel contra el tráfico de drogas; esclareció en la Avaro el crimen del recluso Fernando Iglesias durante un permiso a manos de dos conocidos en prisión; la captura de una banda organizada que cometió 37 robos en la provincia, destacando bodegas y viviendas de Verín, así como la reciente operación Castle: un atraco en Boborás con víctimas mayores que fueron agredidas.

Además, tanto el coronel como el subdelegado del Gobierno, Emilio González, loaron ayer la labor humanitaria de agentes como los que, en julio, rescataron a vecinos de las aldeas afectadas por las riadas.

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