Xosé Carlos Fernández, en su calidad de experto en materia ferroviaria, señaló: "Si bien no puedo meterme en el desarrollo urbanístico y de la intermodal, pues es algo que compete a los arquitectos, sí observo cambios en el trazado original que hacen que 100.000 metros de suelo colindantes a la calle Río Arnoia queden absolutamente inservibles, es decir, que media estación carecerá de uso y dejará además un paisaje de barracones a la vista".
Propone, en este sentido, que las vías de la estación de Ourense "no queden como un depósito de trenes, pues Adif dispone de instalaciones de depósito construidas al efecto, donde deben aparcar los trenes que tienen su término o su inicio en Ourense, durante los tiempos que no se hallan en circulación. Las vías de la estación de viajeros equivalen a "suelo urbano", con alto valor de coste, no son suelo industrial", indicó.
En cuanto a la zona de mercancías explicó que "la mayoría trenes de mercancías que circulan por la estación de Ourense son "pasantes", no tienen nuestra ciudad como origen ni como destino."
Por eso, cree que Ourense " debe solicitar a ADIF implantar su Estación de Mercancías en el entorno del Polígono de San Cibrán, donde ya hay prevista la implantación de la ciudad del Transporte.
Por esto, en su trabajo propone que Ourense "solicite a Adif que libere unos 100.000 m2 de la parte norte de la estación Ourense-Empalme, hoy innecesaria para la funcionalidad de mercancías ferroviarias y eliminar las desproporcionadas instalaciones, viejas, obsoletas y destartaladas que ocupan una importante parte de terrenos en el casco urbano". Recuerdan que fueron expropiados en su día por la necesidad ferroviaria, pero hoy esta necesidad ha desaparecido".
