El Instituto Geográfico Nacional (IGN) tuvo constancia de un movimiento de tierra de una magnitud de 2,2 grados y una intensidad que no llega al primer grado en la localidad de Quintela de Leirado. Este seísmo se una a los registrados durante todo el mes de agosto en la zona de Outomuro y Cartelle donde se llegaron a contabilizar más de treinta seísmos en unos escasos veinticinco días.

Los datos facilitados por el IGN certifican que el terremoto registrado tuvo su epicentro a 16 kilómetros de profundidad, por lo que la escasa magnitud e intensidad no fue perceptible por los vecinos de la zona.