Expertos de 17 países se reúnen desde ayer en Lobios para analizar el papel de los balnearios en el desarrollo de los territorios afectados por la regresión demográfica. La iniciativa forma parte del programa Raia Termal, un proyecto coliderado por la Confederación Hidrográfica Miño-Sil, la Diputación de Ourense y los municipios transfronterizos portugueses de Terras do Bouro y Melgaço, y pone el foco en los balnearios como fórmula para combatir las despoblación y el envejecimiento en el rural "vaciado" en este espacio "raiano" entre Ourense y Portugal.
A través de ponencias y mesas de debate, el Congreso Internacional de Termalismo 2021-2027 pretende fijar las claves para la dinamizació destacando el valor social del termalismo y la importancia de la actividad económica que genera. Sobre todo en espacios rurales como los que abarca el proyecto europeo transfronterizo Raia Termal, con fuertes desequilibrios demográficos que la economía termal puede ayudar a combatir.
En este sentido, los expertos recordaron la dispersión poblacional, el envejecimiento o la baja natalidad que afecta al rural ourensano son criterios a tener en cuenta para fijar el próximo reparto de fondos europeos del periodo 2021-2027, por lo que esta financiación podrá ser aprovechada por los territorios termales que, a su vez, deberán potenciar la conservación y uso de los entornos fluviales.
La inauguración del congreso, que se celebra en el balneario de Lobios, contó con la participación del presidente de la CHMS, José Antonio Quiroga; el vicepresidente segundo de la Diputación de Ourense, Armando Ojea; el presidente de la Cámara Municipal de Terras de Bouro, Manuel Tibo, y José Adriano Lima, vereador de la Cámara Municipal de Melgaço, socios en Raia Termal.
El presidente de la CHMS incidió en que el objetivo central del proyecto consiste en "aprovechar la riqueza natural" que ofrecen las aguas termales "como palanca de dinamismo socioeconómico en un mundo cambiante y con continuos retos". José Antonio Quiroga puso así en valor un territorio entre dos países caracterizado por la baja densidad de población, por el envejecimiento, la escasa natalidad y la poca actividad socioeconómica, "pero con una gran potencialidad".
El Congreso arrancó con las intervenciones de Thierry Dubois, presidente de la European Spas Association, y del presidente provincial, Manuel Baltar, que coinciden en la necesidad de "potenciar el termalismo medicinal y social a nivel europeo". Baltar, que en los próximos días tomará posesión como presidente de la red termal pública EHTTA, que integra 51 espacios termales de 17 países, defendió el termalismo como un "aliado para el reto demográfico" y destacó la importancia de crear en el entorno "raiano" un único destino termal de frontera, objetivo que persigue el proyecto Raia Termal. "El termalismo será una herramienta para el desarrollo demográfico, dinamización rural, puesta en marcha de negocios de hostelería, negocios termales... en definitiva, de vida", incidió.
A modo de ejemplo, el presidente de Asia Pacific Spa Wellness Coalition, Andrew Jacka, explicó a los asistentes los principales enfoques de dinamización territorial rural basados en el termalismo desarrollados en la región Asia-Pacífico, que generaron un incremento del 25% en la tasa de facturación del sector termal.
Margarita Meijome, representante Consellería de Política Social de la Xunta, destacó el enfoque terapéutico y social que ofrecen los balnearios. Por su parte, el director del área de Benestar de la Diputación de Ourense, José Juan Cerdeira, detalló la experiencia de esta administración en la dinamización de los territorios mediante el desarrollo de una oferta termal.
Asimismo, Manuel Campo Vidal, presidente de Next Educación, expuso su visión sobre el reto demográfico y explicó que "los balnearios son una oportunidad para crear un microclima cultural; ofrecen trabajo, fundamentalmente a mujeres, que son las que fijan población".
