A una semana de la celebración de la Banned Books Week, la Semana de Libros Prohibidos promovida por la American Library Association y Amnistía Internacional, la biblioteca pública de Ourense lleva todo el mes sumergida entre títulos que han sido censurados o objeto de polémica a lo largo de la historia. Y no hace falta retrotraerse a la Inquisición o el franquismo para encontrar referencias eliminadas de las librerías. Algunas publicaciones siguen suscitando hoy controversia en las salas de préstamo de las bibliotecas.
Sin ir más lejos, el cómic Mi novio caballo, de la viguesa Xiomara Correa, generó recientemente críticas de algún lector en la biblioteca pública ourensana. Por tal motivo, hoy es uno de los muchos ejemplares que simbólicamente lucen la faja amarilla de censurado: "Acusado na nosa biblioteca de incitar á zoofilia". Así se cuela un libro del siglo XXI entre otros títulos que fueron prohibidos en el pasado como El Lazarillo de Tormes, La Metamorfosis, de Franz Kafka, o La rebelión de las masas, de Ortega y Gasset.
La coordinadora de esta iniciativa, María Benítez, explica que en la sección hay de todo, desde libros reprobados hasta títulos que se han visto amenazados por la censura o aquellos que por diferentes motivos fueron retirados puntualmente de colegios, bibliotecas o librerías.
No se salva ni el afamado Harry Potter, de J.K. Rowling. Alguna escuela católica de Estados Unidos llegó a prohibirlo afirmando que hay conjuros reales en el universo del niño mago. En general, la saga ha sido acusada en ese país de incitar a la brujería. María Benítez explica que la censura se justifica casi siempre en motivos "muy generales: visiones políticas, violencia, pornografía, personajes LGBTI... y a veces incluso ridículos". Los cómics, pone por ejemplo, suelen ser diana de las protestas de usuarios de las bibliotecas porque muestran escenas de contenido sexual.
La campaña anual Banned Books Week, a la que se ha sumado la biblioteca pública de Ourense, defiende el derecho a la libre expresión y a la libertad de leer. Este centro ha elegido una veintena de títulos "polémicos" menos conocido para la exposición pero los fondos contienen decenas de títulos que han estado bajo el foco de la censura. Desde La Celestina, de Fernando de Rojas, que fue expurgado de las bibliotecas durante el franquismo, a La casa de los espíritus, de Isabel Allende, prohibido en Chile durante la dictadura de Pinochet. Don Quijote de la Mancha no se libró de la censura y fue acusado de afirmar que los actos de caridad realizados negligentemente carecen de mérito. Tampoco Las aventuras de Tintín en el Congo, prohibido en Inglaterra hasta 2005 por racismo y exaltación de la caza mayor.
