A cuatro incendios por día. Ese es el balance que se hace de la primera quincena de septiembre después de que el día 2 arrancase una oleada de incendios que se alarga en el tiempo y donde la previsión de lluvia invita a pensar que haya días sin incendios.
El temido noveno mes del año se convierte en un periodo negro tras un verano donde no se contabilizaron incendios y, solamente, ciertos conatos en diferentes puntos de la provincia presagiaron lo que sucedería en septiembre.
Los alcaldes de las zonas de alto riesgo de incendio avisaban: "Esperemos que no sea un septiembre negro". Sin embargo, y tras analizar los datos de la Consellería de Medio Rural y los servicios de emergencias la advertencia política se ha hecho realidad. En total, la provincia de Ourense registró 63 incendios desde el día 2 del mes de septiembre hasta ayer día 16.
| Primer incendio. La localidad de Robledo, en el Concello de Carballeda de Valdeorras, fue el primer punto donde el fuego se dejaron sentir las llamas. Fue el día 2 de septiembre. Precisamente el mismo día, un incendio en Baronzás, en Xinzo de Limia presagiaba la sucesión de fuegos que seguirían durante los días siguientes.
| Cenlle, 35 hectáreas. Un accidente y posterior incendio de un coche en la A-52 a la altura de la parroquia de A Barca, en Barbantes, provocó un fuego en el monte que en un primer momento quedó extinguido con un total de veinte hectáreas. Sin embargo, las llamas se reavivaron y calcinaron más de 35 hectáreas. El primer "gran" incendio del mes. Riós, San Lorenzo y Covas (Trives) fueron otros puntos donde se registraron fuegos durante el 3 de septiembre. La actividad incendiaria se calificaba de alta con el aviso de otro incendio en Outomuro con un gran despliegue de medios de extinción.
| El Xurés. El Parque Natural del Xurés sufrió la devastación de su ecosistema en 150 hectáreas después de un incendio que se inició en Lobeira el día 5 de septiembre. Un total de monte calcinado al que hay que sumarle las 10 hectáreas calcinadas del incendio iniciado en Requiás, en el municipio de Muíños.
| Día 8. El octavo día del mes fue el peor día en cuanto a número de incendios se refiere, un total de nueve incendios. Dos en Xinzo de Limia, dos en Viana do Bolo, Vilariño do Conso, A Bola, Vilardevós, Velle y Bande vieron como ardían, en mayor o menor medida, sus montes. A medida que pasaban los días, los incendios incrementaban su grado de complejidad y su voracidad en la provincia de Ourense.
| Oímbra y A Gudiña. Estos dos municipios ourensanos son dos de los concellos donde se registra una actividad incendiaria de alto grado. En Oímbra, se registraron un total de cinco incendios con intensidad elevada y en A Gudiña otros cinco, donde el último que entró por Portugal arrasó 440 hectáreas. La actividad incendiaria da un respiro con la aparición de las lluvias. Ayer, en Beariz, se registró otro incendio de pequeñas dimensiones a las 19.30 horas, aproximadamente. La tregua de las llamas remite tras calcinar más de 600 hectáreas en la provincia.
