El Concello de O Carballiño sigue sin cerrar negociaciones para la ampliación del cementerio de Señorín, al no haber llegado a un acuerdo de compra-venta de una parcela de más de mil metros cuadrados. Sigue sin nichos disponibles para atender la demanda, lo cual también sucede con el de Mesego. Una situación similar viven los vecinos de Ribadavia cuyo campo santo en el centro de la villa no tiene para dónde ampliarse y llevan años a la espera de la aprobación definitiva del PXOM para construir uno nuevo en Francelos.
El alcalde carballiñés, Francisco Fumega, apunta que las negociaciones para la compra de terrenos prosiguen aunque sin éxito, y ya no hay nichos disponibles. La intención es construir un campo santo civil, independiente del religioso, con un tanatorio, nichos, y columbarios para depositar urnas con las cenizas.
Y según el cura párroco de Mesego, José González, ahí tampoco hay nichos y "la demanda es grande". Dice que la intención es ampliarlo pero los propietarios colindantes "piden mucho y no compensa", por lo que muchos vecinos optan por buscar en otros cementerios próximos.
También en Ribadavia muchos han recurrido al campo santo de concellos vecinos como el de Carballeda de Avia, o parroquias próximas.