La provincia se estremece y guarda en el cuerpo el susto de un mes con un índice sísmico que no se recuerda en años. Ourense vivió ayer un nuevo terremoto, esta vez, en la parte oriental de la geografía ourensana, donde los vecinos de la comarca de Valdeorras

Según los datos recogidos por el Instituto Geográfico Nacional, el seísmo, que se sintió en Carballeda de Valdeorras, tuvo una magnitud de 3.5 en la escala Richter, y se produjo a las 5:29 horas de la madrugada. Precisamente este movimiento es el más alto en cuanto a magnitud se refiere desde 1998.

La localidad valdeorresa fue el epicentro de un seísmo que extendió su vibración hacia diferentes puntos más allá de la frontera de Galicia. Los vecinos de Campo, Ponferrada, Voces (León) y en algunos pueblos de la provincia de Zamora, como por ejemplo Sanabria, notaron el temblor del seísmo ourensano.

El mes de agosto de 2019 y los primeros días de septiembre se muestran como los periodos más activos en cuanto a vibraciones sísmicas se refiere, según los datos facilitados por el IGN. En total, se han llegado a sentir más de 30 terremotos en la provincia.

Al sentido en la comarca de Valdeorras, hay que sumarle el registrado anteayer en Cartelle con una intensidad más cerca del IV que del III. Sin embargo, fuentes del IGN advierten que se acerca más a la cuarta intensidad por lo que redondean la cifra.

Actividad constante

Los terremotos de Cartelle, en intensidad, y de Carballeda de Valdeorras, en magnitud, se encuentran en el segundo escalón del podio de los seísmos más importantes de la provincia de Ourense.

Desde el 28 de mayo de 1998, cuando los edificios de la zona de Quintela de Leirado vibraron con una intensidad de IV y una magnitud de 3.6, no se registraban datos tan altos en el territorio ourensano.

Fuentes del IGN explican que "la situación que se está viviendo en Ourense es una situación normal, sí que es cierto que no ha habido terremotos grandes durante los últimos años y que la actividad están siendo constante durante este mes, pero la población de Ourense no se debe alarmar. Estas situaciones son normales cuando existen fallas que se rompen".

Añaden que estos terremotos no suponen un peligro para la población ni para las infraestructuras ya que "son movimientos de escaso grado, que se quedan en el 3.5 y no llegan nunca al cuatro, ni lo superan". A pesar de ellos, la situación en diversos puntos de Cartelle y su área de influencia ya es habitual que los vecinos se acuesten con el susto en el cuerpo.

El organismo, dependiente del Ministerio del Interior, identifica que los seísmos se producen por la noche o de madrugada, algo que según los técnicos de la Red Sísmica "técnicamente no hay una explicación, además no hay ninguna forma de saber cómo y cuándo se va a producir los terremotos, en sismología no se predecir".

La distancia que separa Cartelle y Carballeda de Valdeorras es importante y desde el IGN quieren dejar claro que "el seísmo del Barco de Valdeorras, las réplicas se suceden en menor magnitud e intensidad donde se han producido otros seísmos de mayor grado".

La provincia de Ourense mantiene una actividad sísmica alta durante los últimos treinta días y se coloca como la segunda zona con más terremotos registrados. La ciudadanía tendrá que acostumbrarse a las vibraciones y los sustos, pero nada de alarmas. Todo es "normal".