"¿Que hay saturación de comercios de textil y calzado en Ourense? Imposible. Esta ciudad fue la capital del pequeño comercio de calidad pero en los últimos años han ido cerrando muchos", considera Sandra Ferro. Añade que "el pequeño comercio ourensano fue el primer atractivo turístico, antes incluso que el termalismo".

Ella es una de las emprendedoras que, junto con su hermana, abrió un comercio de moda, "Le Carrousel", en el número 5 de la calle de la Paz, una de las que se ha relanzado en los últimos años. "Puede que como dicen, toquemos a 200 vecinos por establecimiento de moda, pero la mayoría son franquicias, con ropa y oferta estandarizada, cuando hablamos de la tienda de moda local, son aquellas cosas que tienen un nivel de calidad, y piezas diferenciadas de las que no vas a encontrar repetidas en la calle. Por suerte empieza a haber ya gente concienciada de que si compra en el comercio local invierte en su ciudad".