El nuevo alcalde de Castrelo de Miño, el nacionalista Esteban Suárez, no logró aprobar ayer en pleno el salario para su dedicación exclusiva, que ascendía a 41,467 euros brutos al año, ni la de su teniente de alcalde, Sonia Taboada González, para una dedicación parcial de 22.778 euros brutos al año, ya que al gobernar en minoría, los dos grupos de la oposición, PP y PSOE, votaron en contra.
El grupo de gobierno nacionalistas solo cuenta con tres ediles frente a los tres del PP y otros tres del PSOE, por lo que su alcalde tendrá que negociar su sueldo con la oposición. Y es que los socialistas consideraron que el sueldo que se ponía era elevado y que con los 22.778 euros previstos para la teniente de alcalde le eran suficientes para él, mientras que Taboada no necesitaba ningún dedicación. Por su parte, desde el PP argumentaron su voto en contra diciendo que tanto el regidor como la concejala tienen derecho a ganar un sueldo pero debido a que la oposición cuenta con una mayoría abrumadora debió primero dialogar con ésta los salarios, considerando que era una "falta de respeto" no haberlo hecho.
Ante ello, Suárez los emplazó a una reunión a la que aún no puso fecha.
La dedicación parcial era de 20 horas mínimas a la semana, más las que por la peculiaridad del cargo tenga que realizar. Ayer también acordó que no habrá Juntas de Gobierno, y que las pagas por acudir a Comisiones informativas y a los plenos serán de 100 euros, frente a los poco más de 50 del anterior mandato. Las sesiones plenarias serán cada dos meses.
