La Guardia Civil de Verín y la Guardia Nacional Republicana de Portugal se encargan este verano de mantener la seguridad en el Camino de Santiago prestando servicios conjuntos mediante patrullas mixtas y controles. Cinco agentes de la GNR portuguesa prestan servicio con guardias de la Benemérita para facilitar una atención policial de mayor calidad a los peregrinos y con el objeto de cumplir los objetivos y de acuerdo con lo ordenado en una Instrucción de la Secretaría de Estado de Seguridad, que aprueba el Plan Turismo Seguro. La Guardia Civil contempla dentro de su plan de seguridad varias líneas estratégicas para la "mejora de la seguridad ciudadana", la "luchas contra el crimen organizado" y la "protección del medio ambiente". Estos objetivos permiten un mejor acercamiento con el peregrino, como es el de "mantener e impulsar el carácter Benemérito como reflejo de la voluntad de servicio a la sociedad".

Durante el año pasado, 327.378 peregrinos realizaron la ruta hacia Compostela. Los rasgos naturales de la vía por la que caminan los peregrinos y la distribución territorial de las competencias hacen que sea la institución española la que proporcione la seguridad en este núcleo de forma regular.