En España hay una media de 5,3 enfermeras por cada 1.000 pacientes, frente a las 8 por cada 1.000 enfermos que hay en el resto de Europa. La cifra sin embargo, es todavía más baja en el caso de la provincia de Ourense, "donde pese a tener la población más envejecida de Europa, hay menos de 4 enfermeras por 1.000 pacientes, lo que supone un cincuenta por ciento menos de lo aconsejable, un riesgo y un auténtico deterioro de la atención que se presta", explica Pilar Oviedo, secretaria provincial del sindicacato de Enfermería Satse en Ourense.

Por eso, ayer miembros de este sindicato, entre ellos la propia Pilar Oviedo, participaron en un acto de recogida de firmas a favor de una iniciativa legislativa popular que busca que el Congreso de los Diputados redacte una ley que garantice una media racional de enfermeros.

"Está comprobado en estudios a nivel mundial que aquellos países que cuentan con un número de enfermeros adecuado por cada 1.000 pacientes tienen unos mejores niveles de curación y sanación, dado que la atención y control del paciente de forma constante a través de un enfermo disminuye la mortalidad y tiene un claro nivel preventivo".