El profesor del campus de Ourense en el área de Análisis Geográfico Regional, Xosé Antonio Díaz Fernández, lleva años estudiando la desertización demográfica y el envejecimiento de la población. Desde el departamento de Geografía, Historia y Arte de la Universidad de Vigo, y formando grupo de investigación con los también docentes Carlos Alberto Patiño y Alberto Pazo Labrador, mantiene abierta una línea de investigación centrada en la "pérdida de vitalidad demográfica", un problema que, afirma Díaz Fernández, "es un cáncer silencioso que acaba con la identidad de un territorio".

La desertización demográfica y el envejecimiento de la población, asegura, "son, en términos de gobernanza, el principal problema que tiene la agenda española". Para comunidades autónomas como Asturias, Galicia, Castilla y León, Aragón y Extremadura es prioritario y exige soluciones urgentes porque es un problema enquistado y va a peor". Invertir esta tendencia "totalmente regresiva", señala el investigador, "exige políticas estratégicas".

La solución, insiste, implica "medidas de sobra conocidas, pero no basta con decirlas, hay que implementarlas con políticas activas". Evitar la fuga de cerebros con políticas activas de empleo, dinamizar el empoderamiento femenino y atraer población inmigrante cualificada que se integre en zonas prioritarias (Ourense y Lugo) son medidas urgentes. "Es necesario emprender políticas estratégicas para la dinamización territorial que impliquen a varias consellerías (política social, medio rural, ordenación del territorio...). Un modelo de compartimentos estancos retrasa el proceso mientras el flujo de población sigue desplazándose hacia la costa", advierte.