El pasado otoño, C. S. Q. fue detenido y quedó en libertad como sospechoso de provocar siete incendios forestales entre el 27 de agosto y el 8 de octubre. El joven, vecino de Os Blancos de 23 años, formaba parte de la brigada municipal en aquella campaña de lucha contra el fuego. Ahora trabaja en un taller pero volvió a resultar sospechosos para la Guardia Civil por la supuesta autoría de 16 incendios, entre enero y junio de este año. El Seprona de la Comandancia de Ourense lo pilló prendiendo fuego en un monte de Nocedo de Ribeira, en su municipio, la madrugada del sábado al domingo. Presuntamente, intentó embestir a dos agentes con el coche. Tuvieron que apartarse para no ser alcanzados. Con su identificación clara, el Seprona detuvo al joven a las 16 horas del domingo. La jueza de Xinzo dictó ayer prisión provisional comunicada y sin fianza, por presuntos delitos de incendios forestales y atentado a agentes de la autoridad. Ingresa en el centro penitenciario de Pereiro.

El instituto armado dio con el supuesto incendiario en el marco de la operación 'Agalladeira II'. El Seprona de Ourense llevaba tiempo investigando al sospechoso y, este fin de semana, lo sorprendió en plena comisión del delito. La madrugada del domingo fue pillado in fraganti prendiendo fuego, después de que los agentes hubieran detectado otros dos focos más por la zona. El joven llevaba un objeto que no pudo ser identificado porque era de noche pero que desprendía llama, según explican fuentes del caso.

En el momento en que los agentes dieron el alto al presunto incendiario, con las luces azules del vehículo, y cruzaron el vehículo, el investigado presuntamente ladeó su coche, obligando a los guardias a apartarse para evitar el atropello. Los funcionarios constataron que era el único ocupante del turismo, identificando además el coche. Tras ser detenido, en el juzgado se acogió a su derecho a no declarar.

Los dieciséis incendios que la Guardia Civil atribuye al joven exbrigadista ocurrieron entre enero y junio en los municipios de Os Blancos, Baltar y Xinzo de Limia. En total ardieron 3,75 hectáreas de monte arbolado y raso. El ingreso en prisión preventiva del investigado, a dos semanas de que comience la campaña de máximo riesgo, reduce la amenaza en la zona, a ojos de los investigadores. "Seguramente seguiría produciendo otros", relatan.

La Guardia Civil cree que el detenido presenta un problema de adicción a las drogas y al alcohol que podría motivar sus conductas.