La sala de juntas de la Confederación Empresarial de Ourense, CEO, celebró ayer una junta directiva urgente para abordar la impugnación de la candidatura liderada por la actual vicepresidenta, Marisol Nóvoa, formulada por el equipo rival encabezado por Lois Babarro, tras detectar que uno de los vocales, el representante de Adeido, Benito Iglesias, no estaba al día en el pago de las cuotas, un requisito exigible tanto para ir en una lista como para votar.

Ambas partes expusieron sus argumentos durante algo más de una hora y finalmente se elevó la impugnación a votación. Algunos de los asistentes optaron por abandonar la sala sin votar, entre ellos el propio Babarro, alegando en base a un informe jurídico que este mecanismo no procede en un caso así, sino que se trata de si se cumple o incumple la ley.

Finalmente, por 47 votos a favor y tres abstenciones, la junta directiva consideró improcedente la impugnación. Con esta decisión, explicó la entidad a través de un comunicado, "el máximo órgano de la CEO entre asambleas da vía libre a la concurrencia de las dos candidaturas presentadas a las elecciones de la entidad", fijadas para hoy, a las ocho de la tarde, en la sede de Afundación. De este proceso saldrá el presidente de la entidad durante los próximos cuatro años.

La impugnación ha enfangado el proceso electoral convocado tras el fallecimiento del que fuera presidente de la entidad desde 2013, José Manuel Pérez Canal, y es posible que el conflicto no acabe aquí y continúe en los juzgados. La parte alegante censuró que no se permitiese la asistencia de la asesora jurídica de la CEO para que aclarase si procedía o no la votación.

La paz de la corta campaña electoral se rompió el lunes con la impugnación de la candidatura de Marisol Nóvoa registrada por el presidente de la Asociación de Jóvenes Empresarios, Lois Babarro, y una segunda el martes que exigía la convocatoria de la junta extraordinaria.

La interpretación de los plazos y la normativa aplicable enfrentó a las dos listas, ya que mientras los de Marisol Nóvoa alegaron que existía un compromiso de pago firmado que tenía validez a efectos de la convocatoria y que la impugnación llegó a destiempo porque los estatutos establecen dos días naturales, Babarro esgrimió el acuerdo "soberano" de la asamblea electoral que tiene en cuenta que dicho plazo coincide en fin de semana y fija el lunes 3 de junio a las 19.30 horas como límite para alegar.

Momentos antes de que se reuniese la junta directiva extraordinaria, Babarro defendía la impugnación apelando a la "transparencia y la legalidad" como valores inquebrantables del equipo que lidera: "Los empresarios debemos ser ejemplo de gestión; qué pensaría la ciudadanía si un candidato a alcalde llevase tres años sin pagar impuestos; pues hay informes jurídicos que demuestran que hay quien lleva tres años sin pagar las cuotas de la CEO y que pretende erigirse en representante de la entidad", lamentaba.

Por su parte, Marisol Nóvoa defendió la tesis del secretario general de la CEO que desestimó inicialmente la impugnación y mostró su disgusto con el cariz que ha tomado la campaña: "No me gusta nada, se está dañando muchísimo la imagen de la CEO; no es mi estilo, las elecciones se ganan en las urnas y no impidiendo que otras personas se presenten", indicó.