Después de cuatro años buscando su hueco y su voz desde la minoría de 3 ediles de 27, Martiño Xosé Vázquez encabeza la candidatura al Concello de Ourense en uno de los escenarios más difíciles, pues las encuestas son esquivas, y en el hemiciclo municipal no se aventuran mayorías. OUeC ya lanzó las redes y ve a PSOE como su aliado natural contra lo que califica como "la apisonadora de la derecha que fueron PP y DO".

-Después de un mandato plagado de tensiones plenarias. ¿Merecía la pena volver?

-Vimos en estos cuatro años la potencialidad del Concello para transformar la vida de la gente. Pero no se hizo nada. Arrasaron con política cultural (festival de cine, Outono Fotográfico), con las políticas sociales. Hicimos los que pudimos, pues éramos solo tres en una esquina, sin posibilidad de sumar mayorías. Volvemos para emplear ese potencial que tiene el Concello para un gobierno verde, de progreso, que transforme la ciudad.

-Pese a lo gris de las encuestas, ¿qué balance hace ya al remate de la campaña?

-Nosotros no podemos competir con esa maquinaria de mailings, eventos pagados y banderolas. Somos la tienda de barrio y hemos competido desde la cercanía y la proximidad. Les hemos contado a los vecinos que buscamos un cambio estructural contra el éxodo de jóvenes (2.500 menos en diez años) o una transformación ecológica. Hay que hacer un cambio de las políticas de recogidas de tratamiento de residuos, cambios del modelo de limpieza.

-¿Cómo piensa convencer al elector endémico, que vote por un cambio estructural y ambiental en el servicio de limpieza, cuando lo que prima es votar a quien coloca al hijo en el servicio de limpieza (por poner un ejemplo)?

-Ya empezamos a trabajar ahí. En estos cuatro años recuperamos la dignidad en el Concello de Ourense, paralizando los enchufes estratégicos del PP. Hasta la jefatura de Personal era enchufe directo. Nosotros denunciamos y paramos eso.

-Denuncian ustedes lo mismo que DO.

-La labor de DO en estos cuatro años como segunda fuerza fue solo reactiva, no constructiva.A todos en algún momento nos puede salir el Nerón que llevamos dentro, y dar un golpe en la mesa, pero ese momento de enfado debe ir acompañado de un proyecto de futuro. Los reactivos sin más, no valen para nada.

- ¿Cuál es el oro escondido que permitirá a Ourense salir del vagón de cola?

-Apostamos por tres, entendiendo las limitaciones de Ourense en materia de competencias. Primero potenciar el sector primario. Tenemos una indicación protegida y cuatro denominaciones de origen. No entendemos cómo el Concello no participa en fomentar ese sector primario en lugar de fijar todo en el sector servicios, con contratos temporales.La zona do Bellao era de excelente producción vinícola. No hace tanto los pimientos de Seixalbo tenían tal calidad que venían a comprarlos desde Vigo. Todos esos productos podrían venderse frescos en la plaza de abastos. El otro pilar es el termalismo, pero vinculado a la innovación a través de otro gran valor, el campus, y a nuevas vías de explotación como la cosmética, por ejemplo. El tercer "oro" de Ourense es que el problema del envejecimiento se convierta en oportunidad, generando servicios en su cuidado y empleo para generaciones futuras. Aquí no cabe hablar de proyectos como la industria textil, porque es un factor de producción fácilmente deslocalizable.

-En un contexto tan polarizado ¿Caben pactos por afinidad ideológica o cualquier otro acuerdo va abocado al fracaso?

-Ourense en Común fue el primero en hablar de pactos. Las 15 fuerzas demuestran que el bipartidismo desapareció. Nuestro socio preferente es el PSOE y pedimos reciprocidad. Llevamos cuatro años trabajando en el Concello con ellos como oposición de progreso minoritaria, frente a las políticas de derechas de PP y DO.

-¿Y si el PSOE tiene ya otros objetivos a la hora de pactar?

-Nosotros preguntamos hasta 4 veces a Villarino (PSOE) si pactará con DO y no nos respondió. Días después Jácome habló del "pacto del pisito", un piso en el que dijo que había negociado con el PSOE. Teniendo en cuenta que Jácome está dispuesto a pactar hasta con Vox, nuestro mensaje a los socialistas es que voten a OUeC si quieren mantener su voto de izquierdas. Por pactos de conveniencia como ese, vamos a seguir perjudicados todos los ourensanos. Espero que el electorado de PSOE reaccione.