El Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 1 ha condenado al Concello al pago de 15.000 euros a una vecina de la ciudad como consecuencia de una caída en la plaza pública de San Antonio, a cuya cantidad se le deberán sumar los intereses legales desde la fecha en la que se presentó el recurso.
De esa forma la magistrada estima la reclamación de responsabilidad patrimonial de la ciudadana, solicitando una cuantía económica de 29.569 euros, que finalmente fue rebajada por el propio judicial, aunque reconoce la responsabilidad del Concello.
Una resolución judicial que se conocía ayer al término de la reunión que celebró la Junta de Gobierno Local, siendo la secretaria de la misma, la edil de Recursos Humanos y Personal, Flora Moure, en ausencia del alcalde, Jesús Vázquez, la que daba cuenta de la misma, sin hacer otro tipo de consideración al respecto.
La zona de la plaza de San Antonio, así como otras calles del casco histórico y plazas de la ciudad, que se encuentran con importantes deficiencias en su firme, provocaron que las reclamaciones patrimoniales, en su mayoría por caídas, se incrementasen sustancialmente.
Y aunque por parte del Concello se rechazan, en algunos casos esgrimiendo que se producen en calles que no son de su titularidad, y en otro por no considerar que se deban al estado de esas calles, al final los ciudadanos afectados acuden a la vía judicial y, como es el caso, condenan al Concello a indemnizar.
La resolución que coincide con el inicio de diferentes obras en calles del casco histórico, como la de Lamas Carvajal, Avenida de Pontevedra o la plaza del Correxidor, en las que también se produjeron caídas de ciudadanos que ya formalizaron la correspondiente reclamación patrimonial y están a la espera de resolución, en unos casos por la vía administrativa, y en otras por el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo.
Para la oposición, esta sentencia no hace más que reflejar el estado en que se encuentra la ciudad por la "nefasta gestión" del gobierno popular, y califican de "lavado de cara de última hora" las obras que se están realizando, y que consideran no resuelven una situación que se fue deteriorando durante los últimos cuatro años.
