Sobre la situación de impago, Acuaes había remitido las facturas sin que fuesen abonadas, como se plasma en varios informes de la Tesorería municipal relativos a la morosidad, lo que llevó a que el consejo de administración de Acuaes acordase realizar la reclamación del pago de las facturas pendientes en concepto de "abastecimiento y saneamiento de Agua de Ourense", mediante "diferentes e infructuosos escritos" que envía el 10 de mayo de 2018 para que se procediese a dar debido cumplimiento a las obligaciones económicas asumidas en virtud del convenio firmado en su momento.

El 13 de julio de 2018 traslada al Concello, con "expreso apercibimiento y manifestación de que si en el plazo de tres meses no se procede a realizar el pago de los importes pendientes, o no se llega a un acuerdo con Acuaes, se procedería a la reclamación legal de la deuda, formalizando el oportuno recurso contencioso-administrativo contra lo que considera una "clara y manifiesta inactividad" del concello.

Y así se hizo finalmente, con lo que se procedía a la apertura de un procedimiento judicial que está a la espera que el la parte demandada -el concello- remita el expediente, para poder sustanciar una reclamación millonaria con la que el gobierno local asegura estar en desacuerdo.