Hay una baraja de cartas éxito de ventas que es de todo menos discreta, en palabras de su propia creadora, la ilustradora Antía Alberte, que la confeccionó desde un prisma feminista, por lo que las copas son menstruales y los bastos adoptan forma de consoladores.

"Todo comenzó durante un voluntariado en el Parque Natural del Xurés cuando vi a unas personas jugando a las cartas. Como yo uso la copa menstrual, pensé que podía hacer una baraja distinta, feminista, y al ver el as de copas pensé inmediatamente en una copa menstrual", comenta.

A partir de ahí decidió ponerle el nombre de 'La chica de la Pisa', "un personaje primigenio, que surgió en 2016, a raíz de un proceso depresivo, donde descubrí que sabía dibujar, con veinte o veintiún años", en un intento de "normalizar" aspectos cotidianos de su vida.