El niño tenía cuatro años y caminaba por la acera de la calle Emilia Pardo Bazán de Allariz. Al llegar a un paso de peatones elevado con plataforma cruzó por él y cuando ya había recorrido 7,20 metros recibió el impacto frontal de un vehículo que lo desplazó dos metros y lo tiró al suelo. Ocurrió a las 17,15 horas del 5 de abril de 2017 y el conductor se sentó ayer en el banquillo del Penal 2 acusado de un delito de imprudencia grave con resultado de lesiones.

La fiscal solicitó una pena de 1.800 euros de multa y la retirada del carné durante un año y nueve meses.

El acusado, octogenario, tenía 79 años cuando ocurrieron los hechos. Según recoge el escrito de acusación, aquel día conducía "de manera totalmente desatenta y descuidada, sin prestar atención a la circulación vial". Así lo afirma porque, señala, "al llegar a un tramo recto de buena visibilidad en plano descendente", con la correcta señalización, "no se percató con la debida antelación" de que el niño caminaba por la parte izquierda de la calzada y cruzaba.

La prueba de alcoholemia apreció una tasa de 0,25, en el límite de lo que supondría una infracción, y la fiscal señala que "influyó en la falta de reacción adecuada por parte del acusado".

El pequeño sufrió contusión en caderas y traumatismo cráneo encefálico.