Tras pasar dos semanas en el Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO), entre la Unidad de Cuidados Paliativos (UCI) y el servicio de agudos de Psiquiatría, el cura Manuel V. D., de casi 78 años, ya no está hospitalizado. El sacerdote fue denunciado y está pendiente de su previsible citación judicial como investigado por un supuesto acoso a un menor de edad, al que presuntamente remitió 671 wasaps en 23 días, muchos de índole sexual.

El juez de Instrucción 2, Luis Doval, acordó la semana pasada la citación de la víctima para oír su relato de los hechos y para que se ratifique en el atestado de la Policía Nacional. Su declaración en calidad de testigo perjudicado supone el primer paso de la fase de instrucción judicial y definirá la probable citación del religioso.

Además de la causa penal, que amenaza al religioso con penas de 3 meses a 2 años de prisión, o multa, la Diócesis de Ourense tramita en paralelo un proceso canónico, tras apartarlo de la parroquia de Seixalbo.