Dos hombres y una mujer acusados de utilizar un piso de Ourense para vender droga serán juzgados el 4 de abril por la Audiencia Provincial. La Fiscalía solicita una petición de condena de tres años y medio para dos de los encausados, y de seis años para un varón que cuenta con dos condenas anteriores por trapicheo (de año y medio y tres años de cárcel, respectivamente, dictadas ambas por la misma sala que volverá a enjuiciarlo). Los tres cayeron en el mes de mayo de 2017 en una operación policial en la que intervinieron, como apoyo, agentes de los Grupos Operativos Especiales de Seguridad (GOES). Cuando el inculpado reincidente se dio cuenta de que había una redada, intentó borrar pruebas deshaciéndose de parte de la droga. Arrojó por la ventana cuatro recipientes de plástico que contenían 48 envoltorios de una sustancia que resulto ser heroína, así como 205 envoltorios de una sustancia que era cocaína.

Culminados las detenciones y los registros, la Policía se incautó de un total de 39,561 gramos de cocaína y de 17,533 gramos de heroína, en distintos grados de pureza. El valor total de la sustancia estupefaciente localizada es 4.759,05 euros. Por estos hechos, calificados por la Fiscalía como un delito contra la salud pública, los tres encausados se enfrentan, asimismo, al pago de una multa de 14.500 euros, cada uno de ellos. Los tres permanecen en libertad por esta causa.

Vigilados desde 2016

El caso llega a juicio a la Audiencia Provincial de Ourense, tras investigarse en el Juzgado de Instrucción 2 de la ciudad desde 2017. Desde el mes de septiembre de 2016 el grupo estaba siendo vigilado por el grupo antidroga de la comisaría de Ourense, como sospechoso de dedicarse a la venta de drogas al menudeo en un piso, del que es propietario uno de los hombres acusados, quien presuntamente es el encargado de reponer la mercancía y de recoger las ganancias, y con el que colaboran en la distribución los otros dos acusados.

Los policías establecieron varias vigilancias para reunir los indicios suficientes con los que solicita al juzgado una orden de entrada y registro. La madrugada del 7 de abril de 2017, los agentes vieron a una persona saliendo del portal tras comprar tres bolsitas de una sustancia blanca en el piso tercero. La noche del 2 de abril ya habían observado a otra que acababa de comprar una bolsita de una sustancia polvorienta. La tarde del 23 de marzo un hombre portaba un envoltorio de plástico con una sustancia polvorienta que acaba de comprar en el domicilio. Además, la madrugada del 12 de octubre de 2016, los agentes vieron a otro salir del piso. Llevaba cuatro bolsitas con una sustancia blanca que acababa de comprar en el citado inmueble.

Además dos agentes de policía, entre los días 20, 21, 22 , 29, 30 de marzo y el 2 de abril de 2017, hicieron vigilancias en la zona y comprobaron el ir y venir constante de personas. Solo el 20 de marzo, entre las 17 y las 21 horas de la tarde, los policías contabilizaron la entrada de hasta 70 personas.

Dos vivían justo al lado

Ante las evidencias, la Policía consiguió una orden judicial de registro. Llevaron a cabo la entrada el 10 de mayo de 2017, tanto en el piso que supuestamente era el centro de las operaciones de venta de drogas, como en el de su derecha y en el de su izquierda, donde residían dos de los encausados. En el momento en que los agentes GOES iban a entrar en el domicilio, el acusado reincidente arrojó parte de la droga por la ventana.