Los ourensanos pudieron someterse ayer a pruebas de glucosa, peso y tensión en la carpa informativa instalada por la asociación Alcer -la asociación para la lucha contra las enfermedades renales en Ourense- en la céntrica calle del Paseo, con motivo del Día Mundial del Riñón. También hubo un puesto en el vestíbulo del edificio cristal del Complexo Hospitalario Universitario de Ourense (CHUO). Profesionales de enfermería se encargaron de las mediciones, con la presencia de voluntarios de la entidad. Alcer promovió esta iniciativa para subrayar la importancia de la prevención y visibilizar la dolencia.

En la provincia hay 220 personas que se encuentran en tratamiento de diálisis y Alcer cuenta con 117 socios. La enfermedad renal ha crecido alrededor del 30% en los últimos diez años. Esta semana, el colectivo advertía de que "los seguros privados no tienen un centro de diálisis propio en Ourense y se niegan a pagar el elevado coste del tratamiento en la Seguridad Social", lo que obliga a muchos a acudir a Vigo o A Coruña.