El campus de Ourense acogió ayer la primera sesión de una jornada de prevención y sensibilización sobre violencia sexual en los jóvenes que llegará a los siete campus gallegos y que puso sobre la mesa los últimos datos conocidos sobre la violencia sexual en Galicia y en España.

Las cifras recogidas por el Ministerio del Interior y presentadas en este foro por la secretaria xeral de Igualdade de la Xunta, Susana López Abella, revelan un aumento del 27,3% en el número de denuncias por violación en Galicia, al pasar de 44 casos en 2017 a 56 en 2018. También crecieron un 17,5% las relacionadas con agresiones sexuales sin penetración.

En el contexto nacional, el pasado año se registraron en España 1.702 denuncias por violación frente a las 1.387 de 2017, lo que supone un incremento del 22,7% en un sólo año. Susana López Abella entiende que en esta tendencia tiene cabida también el hecho de que cada vez se denuncia más, si bien destaca que las cifras que hacen referencia a la violencia sobre la mujer son sólo al "punta del iceberg" porque todavía existe en las víctimas el "miedo a contarlo y a ser cuestionadas en su denuncia". En este sentido, la secretaria de Igualdad de la Xunta anima a las mujeres que padecen esta lacra a "salir de la oscuridad" para combatir y erradicar la violencia machista.

López Abella se refirió también a la macroencuesta realizada por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género con datos de 2015 que revela que el 8,1% de las mujeres de más de 16 años residentes en el país ha sufrido en algún momento de su vida violencia sexual por parte de su pareja o expareja. La secretaria de Igualdad destacó, por ejemplo, que un 6,4% fueron obligadas a mantener relaciones sexuales cuando no querían y que el 6,1% accedió a mantenerlas sin desearlo por miedo a lo que pudiera hacerle su pareja o expareja si no consentía.

Susana López se mostró convencida de que estos datos sólo reflejan una parte de la realidad porque, recordó, "en España sólo un 20% de las afectadas denuncian sufrir violencia física o sexual; ellas son la punta de un iceberg que espera su particular Titanic para salir a la luz y revelar su verdadera inmensidad".

En este sentido, la responsable de Igualdad en el gobierno autonómico destacó que la jornada que ayer se celebró en el campus organizada por su departamento y las tres unidades de Igualdad del Sistema Universitario de Galicia responde las medidas recogidas en el Pacto de Estado contra la violencia de género y que implica a las universidades en la realización de estudios sobre el impacto del acoso, las agresiones y los abusos sexuales en el ámbito académico, así como la realización de campañas de prevención en los campus.

En este sentido, concordó con la catedrática María Lameiras en la necesidad de que la universidad sea "punta de lanza" en la sensibilización y formación de la sociedad contra la violencia de género.

La jornada, que tendrá continuidad en el resto de campus gallegos, contó con la participación del sociólogo, presidente de la Fundación Iniciativa Social y miembro del Foro Hombres por la Igualdad, Hilario Sáez, que abordó el fenómeno de las manadas y mostró su preocupación por las nuevas formas de violencia sexual y la "reacción neomachista" frente a la liberación sexual de la mujer que empezó a finales de los setenta. En este sentido, el sociólogo recordó que lamentablemente la cultura de la violación es longeva pero alertó de trazos y fenómenos nuevos en los que "las prácticas sexuales que se comparten son básicamente formas de hacer sexo que rayan la orgía", con un componente de "grupo homosocial masculino muy potente". Es ahí donde surgen algunos grupos de jóvenes que han convertido "el sexo depredador y la cacería nocturna en parte de su ocio". Hilario Sáez sostiene que estas nuevas violencias sexuales tienen que ver con la ausencia de educación sexual, que se suple con pornografía.

La jornada contó, además, con la participación del profesor de Sociología de la Universidad de Santiago de Compostela, Jorge García Martín, que disertó sobre la performance de la masculinidad hegemónica. Señaló las letras de algunas canciones o videojuegos basados en la humillación de la mujer como formas "de socialización violenta" y apostó por aportar a los jóvenes modelos de masculinidad diferentes para que aprendan a relacionarse de un modo ético y respetuoso con otros hombres y mujeres".

Por su parte, María José Méndez, profesora del departamento de Pedagogía y Didáctica de la USC, abordó experiencias de ciberviolencia entre adolescentes gallegos.