Como era previsible, dada la mayoría absoluta del PP en la corporación provincial, las dos propuestas socialistas debatidas ayer en pleno extraordinario cayeron en saco roto. El grupo de gobierno rechazó retirar honores y símbolos conmemorativos a políticos y cargos públicos que fueron condenados por sentencia firme, como tampoco apoyó la moción que exigía a los 'populares' el cumplimiento del pacto antitransfuguismo denunciando expresamente el "uso de recursos económicos" de la Diputación por parte del presidente, José Manuel Baltar, para "comprar alcaldes".
Durante las dos horas que duró la sesión en plena resaca del día fuerte del Entroido, PP y PSOE se lanzaron fuertes reproches. La portavoz socialista, Elvira Lama, pidió la retirada de placas, imágenes y cualquier simbología referente a cargos condenados judicialmente "que no son modelo de nada", así como instar a las entidades locales a hacer lo propio. Afirmó que "para ser servidor público no solo hay que presumir de ser honrado; hay que serlo", y en alusión al "poco prestigio" que le queda a la Diputación, pidió a los diputados del PP que "actúen para poner a esta institución y a los concellos a la cabeza de la honradez".
Por su parte, el portavoz del grupo de gobierno, Plácido Álvarez, acusó a los socialistas de querer hacer "ruido mediático" con estas propuestas y en particular a la portavoz Elvira Lama de "especializarse en montar espectáculos a las puertas de la Diputación". Sostiene que el PSOE hace demagogia con una propuesta que "sólo demuestra una enfermiza obsesión con el apellido Baltar y la falta de proyecto político". También apeló a la "autonomía municipal" y rechazó la "urgencia" planteada por los socialistas para debatir esta moción a dos plenos del final de mandato, aludiendo así al "oportunismo y electoralismo" de la medida planteada: "José Luis Baltar se retiró de forma voluntaria y discreta en 2012, déjenlo en paz de una vez", apostilló.
Elvira Lama puntualizó que Baltar padre, condenado a nueve años de inhabilitación por contratos irregulares, no es un caso único y que no existe una "manía personal" contra él. De hecho, enumeró una "larga lista" de condenas firmes con nombres como Isaac Vila, Antonio Pérez, Xosé Xaquín Rodríguez, Ventura Sierra, José Antonio Rodríguez, Manuel Velo, Alberto Pardellas, Senén Pousa, Antonio Rodríguez o Manuel Cardoso.
La polémica se encendió todavía más en la segunda parte del pleno, con el debate sobre el pacto antritransfuguismo y la acusación al PP de "incumplirlo escandalosamente" utilizando fondos de la institución. Lama señaló que el único objetivo de Baltar "es personal y es mantenerse en el cargo".
En este punto, el portavoz del grupo de gobierno, Plácido Álvarez, ironizó sobre el proceso de "descomposición" en el que se encuentra el PSOE de Ourense y de manera explícita mencionó las "purgas" denunciadas por el exsecretario provincial Pachi Vázquez. En esta línea, aconsejó a Lama "analizar en su sede las razones de estas bajas", en referencia al cambio de siglas de los alcaldes de San Xoán de Río y Parada de Sil, que acaban de fichar por el PP.
Lama exigió "a los que venden su piel al diablo que dejen el cargo" y a los que "compran" a estas personas "que dejen de hacerlo con fondos públicos".
También aprovechó la portavoz socialista para lanzar un reproche directo a su predecesor Francisco Fraga, que causó baja en el PSOE para situarse junto a Pachi Vázquez en el proyecto Espazo Común y que ahora ocupa su escaño en el grupo de los no adscritos. A juicio de Lama, lo que no gusta al PP es que la portavoz sea una mujer "después de dos años con un portavoz que no les metía en cintura". Fraga, por alusiones, tomó la palabra para declararse "muy feliz" precisamente de ver a los diputados del PP "por primera vez metidos en cintura", ironizó. Y mostró su consideración hacia los regidores de San Xoán de Río y Parada de Sil, sobre los que dijo comprender que "no pasan por momentos fáciles". Concluyó anunciando que se presentará a las elecciones por Piñor bajo otras siglas y así "se verá a quién se vota".
Ambas mociones fueron rechazadas con los votos en contra del PP y la abstención de Democracia Ourensana y del diputado exsocialista Francisco Fraga. El BNG apoyó las dos.
