La aprobación de las últimas modificaciones de crédito permitieron rebajar el nivel de morosidad que tenía el Concello de Ourense. Así lo había anunciado la responsable del área de Hacienda, Ana Fernández Morenza, y en efecto pasó de los más de 100 días a los 53,33 como revela el informe de Tesorería Municipal, de diciembre de 2018. Pero los créditos no evitan que el Ayuntamiento recupere la normalidad, ya que son 20 puntos por encima de lo que establece la ley del pago a proveedores, fijado en 30 días. De ahí que la tesorera señale en el mencionado informe que "se incumple" el plazo previsto en al Ley de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera.
De esa forma, en diciembre del pasado año, el importe de las operaciones pendientes de pago superaba los 6,4 millones de euros, con lo que se estaría pagando a 54 días, cifra que bajaría un punto si se computa también el Consello Municipal de Deportes, que en su caso si cumple con lo que establece la ley, ya que en diciembre el pago medio a a proveedores se situó en 28,19 días.
Por otra parte, y en lo que se refiere al informe de facturas sin tramitar en el cuarto trimestre de 2018, la resultante es que son 418 las facturas con un importe total de algo más de 7,3 millones de euros. Según explica la tesorera, el informe fue remitido a la Intervención Municipal con la relación de las facturas que transcurridos más de tres meses desde que fueron anotadas no se efectuó el correspondiente reconocimiento de obligación de pago por los órganos competentes.
Además subraya el informe que "desde el 1 de enero de 2014 es obligatorio que todas las facturas que se expidan por los servicios prestados o bienes entregados, cualquiera que sea su soporte, serán objeto de anotación en el registro contable de facturas". Destacan, por su cuantía económica, las de Acuaes, que supera los 4,2 millones, o la de la empresa de Limpieza que asciende a 854.204 euros.
Críticas
Unos datos que para los grupos de la oposición no hacen más que confirmar los problemas de gestión que existen en el área económica del Concello, y reiteran las criticas al gobierno popular por una morosidad que afecta directamente a los proveedores, sobre todo a las pequeñas y medianas empresas. Con el agravante de ser algo habitual durante el pasado ejercicio, sobre todo cuando se superó la barrera de los cien días. Alertan de las facturas pendientes con una cuantía económica muy importante, a la que se debió hacer frente.
