La provincia de Ourense ha perdido 2.248 habitantes en solo doce meses, al pasar de los 311.562 que tenía a 31 de diciembre de 2017 a 309.314 al cierre de 2018, según los datos definitivos de población correspondientes al pasado año, publicados ayer por el Instituto Galego de Estatística.
Es el dibujo habitual de una coordenada demográfica en permanente descenso, con una pérdida poblacional que ha afectado casi al 90% de los concellos de Ourense, pues de los 92 ayuntamientos que tiene la provincia, solo 11 han conseguido superar el número vecinos censados.
Ourense ciudad con 103.188 censados (+8) está en esa "lista de los once" municipios de la provincia que han ganado población en 2018, junto con los de Allariz, 6.006 (+79); Amoeiro 2.259 (+44); O Carballiño, 13.718 (+62)); Celanova 5.547 (+28) ; Baltar, 1.041 (+5); Beade 497 (+3); Barbadás 10.479 (+123); Pereiro de Aguiar 6.244 (+126); San Cibrao das Viñas 5.264 (+56) y A Mezquita 1.418 (+30)
Ourense, solo 8 vecinos más
El desglose de los datos de población por comarcas arroja también que solo una de las doce comarcas en las que está repartida la provincia ha mejorado su censo en el último año, y ha sido la de Ourense, que incluye el municipio de la capital y sus ayuntamientos limítrofes, al pasar de los 141.255 vecinos en 2017 a los 141.442 al remate del año 2018, es decir que la comarca ha tenido un incremento de 187 vecinos.
No es la capitalidad, Ourense, la que arrastra sin embargo ese tirón de la comarca, pues la ciudad solo ha incrementado en un año su censo en ocho vecinos más, al subir de los 103.180 a los 103.088 censados.
La pérdida demográfica del buque insignia de la provincia, el municipio de la capital, frenó este año la caída, pese a que los resultados han sido negativos en los últimos tres lustros por el ayuntamiento d la capita; aguantó hasta el 2014 con un censo de 107.000 vecinos y en solo 4 años ha perdido 4.000 censados hasta colocarse en los 103.000 actuales
El cómputo por comarcas arroja también el peor dato en la comarca de Verín con 25.750 vecinos lo que supone -417 respecto a 2017. También destaca la pérdida de 237 censados en la comarca de O Ribeiro, o los 292 menos en A Baixa Limia.
