Los incendios forestales que se han sucedido en Galicia en plena ola de frío, con temperaturas gélidas, afectaron sobre todo a la provincia de Ourense, la de mayor número de incendios de la comunidad a lo largo del año. Desde el 30 de diciembre hasta el 13 de enero se registraron 90 fuegos en la comunidad, de los que 58 -un 64%- ocurrieron en esta provincia. El 90% de los focos de este inicio de año fueron provocados, según "datos fehacientes" de la Xunta, en zonas de difícil acceso y varios focos, aunque la gran mayoría no afectó a más de una hectáreas (61 de 90 fueron conatos). En conjunta arrasaron más de 600 hectáreas en dos semanas en toda la comunidad.
El conselleiro de Medio Rural, el ourensano José González, acudió ayer a Monterrei para reunirse con los alcaldes del Macizo Central -el área más afectada por los incendios de esta época- y solicitar su implicación. Los regidores recorrerán sus parroquias, "pueblo por pueblo", junto a agentes forestales y miembros de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado para concienciar a los vecinos de la problemática y animarlos a que no duden en denunciar. El objetivo de la Xunta es involucrar a la sociedad civil en la lucha contra la actividad incendiaria, especialmente en las zonas de Galicia con incendios recurrente. "Necesitamos, si cabe con más fuerza, la implicación de toda la ciudadanía gallega en la lucha contra los incendios y los incendiarios. Aquel que intencionadamente hace daño a nuestro patrimonio natural y personas es un delincuente. Vamos a utilizar todo el peso de la ley contra ellos y para que repercute en su patrimonio". González recordó que los incendios de inicio año supusieron más de 200.000 euros en gastos de los operativos de extinción.
En la reunión de ayer con el conselleiro y el director xeral de Defensa do Monte, Tomás Fernández-Couto, estaban convocados representantes de los concellos ourensáns de A Gudiña, A Mezquita, Viana do Bolo, A Veiga, A Pobra de Trives, Manzaneda, Vilariño de Conso, Laza, Chandrexa de Queixa y Montederramo. El Macizo Central es la zona más afectada por los fuegos de inicios de año.
José González recordó que la Xunta va a poner a en funcionamiento un número de teléfono gratuito y específico para denunciar conductas incendiarias, en el que se garantizará el anonimato del denunciante. El propósito es facilitar la cooperación de los vecinos en la lucha contra esta problemática, "de manera que puedan alertar sobre actividades sospechosas en el monte de forma totalmente anónima. Por este motivo se prepara un protocolo en conjunto entre la Consellería y los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado para garantizar el correcto empleo de los datos difundidos a través de esta línea", explicaba ayer la Xunta.
En el encuentro mantenido ayer con los regidores de la zona, celebrado en el Concello de Monterrei, el conselleiro de Medio Rural aprovechó para informar a los alcaldes sobre el plan de pastoreo en el que trabaja Medio Rural, de un modo específico para el Macizo Central ourensano, y que está dotado con un presupuesto de unos 800.000 euros. El objetivo es fomentar la ordenación y puesta en valor de este aprovechamiento en toda la zona, así como mejorar la lucha contra los incendios.
El plan previsto por la Xunta contempla el análisis de la situación de los pastos, la estructura y la distribución del ganado en el monte, así como de las necesidades en cuanto a terrenos e infraestructuras como cierres. La intención es regularizar la actividad buscando armonizar la actividad y los intereses de todos los implicados, fundamentalmente ganaderos y propietarios de terrenos. El conselleiro José González manifestó ayer que con esta iniciativa se pretende mejorar la prevención y lucha contra los incendios forestales, puesto que está demostrado que la puesta en valor del monte y el aprovechamiento de sus recursos endógenos -en el caso del Macizo Central, los pastos- repercute de manera positiva en la defensa contra el fuego.
