El Concello de Ourense ha sido condenado por el Juzgado de lo Contencioso número 1 a indemnizar a una vecina de la ciudad, con la cantidad de 12.000 euros por las consecuencias y dolencias crónicas que sufre la denunciante, tras sufrir, hace tres años, un esguince al intentar subir a un autobús urbano. La mujer, entonces embarazada, se lesionó el pie al tropezar con un bache que había en la carretera.

La junta de gobierno local del Concello había desestimado la petición de responsabilidad patrimonial que le reclamaba la demandante, al ser esa administración responsable del estado de las calles de la ciudad. La víctima recurrió y finalmente este fallo anula la resolución recurrida, y condena al Concello a indemnizarla y al pago de costas.

Los hechos ocurrieron en junio de 2015, cuando M.B.A., profesora en la ciudad, iba a subirse el autobús urbano en la calle Carlos Velo. El autobús paró en doble fila, al estar ocupada la parada de este servicio público por un turismo, y la mujer se torció el pie al introducirlo en un socavón.

Como estaba embarazada, no pudo someterse a radiografía y fue tratada de un esguince de grado tres pese a que sufría un esguince de tobillo derecho con rotura de ligamento y fractura de extremidad distal de la tibia, algo que se vio en una resonancia que se le hizo cinco meses después, tras dar a luz.

A la lesionada le quedó como consecuencia de la lesión una "artrosis postraumática importante y no cabe esperar mejoría", concluye el fallo.