La iglesia de Santiago Apóstol de As Caldas, en el barrio de A Ponte en Ourense, el mismo en el que nació hace 57 años Aceites Pérez Delgado, el germen de lo que hoy es la empresa Aceites Abril, fue ayer el "kilómetro cero" de la política y el mundo empresarial de Galicia.

Cientos de personas, de todos los ámbitos, asistieron a la misa funeral en memoria de José Manuel Pérez Canal , presidente de la Confederación de Empresarios de Ourense, vicepresidente de la Confederación de Empresarios de Galicia y cogerente de Aceites Abril, fallecido en la noche del viernes en su domicilio familiar de la ciudad de As Burgas, a los 56 años de edad, y tras seis meses de lucha contra la enfermedad.

Era el último adiós a este abogado que, poco después de rematar su carrera, tuvo que hacerse cargo junto con su madre y parte de sus siete hermanos, de la gestión de la empresa envasadora de aceites -en la actualidad Aceites Abril-, que se ha convertido en referente, con un quinto puesto nacional por facturación, en la lista de firmas del sector empresarial de producción de aceite de oliva, así como un ejemplo de internacionalización e innovación para las pymes gallegas, ya que vende en los cinco continentes y ha conseguido además recuperar la plantación de olivos en Galicia, y como tal la producción de aceitunas, una labor casi abandonada desde la época romana.

Pero la multitudinaria afluencia se debía no solo a la admiración al empresario ejemplar y pionero, sino que fue la despedida al "amigo de sus amigos, y al hombre comprometido con su tierra", repetían ayer mucho de lo cientos de asistentes al funeral, que hicieron pequeña por primera vez la parroquial de As Caldas. Allí se ofició una misa oficiada por el vicario Joaquín Borrajo y concelebrada por 24 sacerdotes, y cuya masiva asistencia obligó a buena parte de los asistentes, a a quedarse en el exterior.

La de ayer fue solo una misa funeral, pues tras el velatorio el fin de semana, el entierro ya se había realizado el domingo en una ceremonia privada de la familia. En las primeras bancadas estaba la mujer del fallecido, Elena Rivo, decana de la Facultad de Empresariales y Turismo de Ourense motivo por el que hubo una importante presencia de representantes del mundo universitario; la madre del empresario, María del Carmen Canal, la primera en tomar las riendas de la empresa cuando falleció su marido, así como los otros 6 hermanos de José Manuel.

Estaban también los hijos del fallecido, Manuel y Alexia todavía muy jóvenes, que protagonizaron algunos de los momentos más emotivos cuando, tras la homilía y las preces, se dio lectura a una carta escrita por Alexia, la hija mayor de Pérez Canal para recordar a su padre el profundo "amor" que le profesaba y como él estaría siempre en su corazón y en su memoria.

Al funeral no faltó en calidad de amigo personal de Pérez Canal y su esposa Elena Rivo, el presidente de la Xunta Alberto Núñez Feijóo, el rector de la UVIGo, Manuel Reigosa, el presidente de la Diputación Manuel Baltar, el alcalde de Ourense, Jesús Vázquez , decenas de delegados territoriales y cargos de la Xunta y empresarios de toda Galicia.

"Trabajó hasta el último día pidiendo incluso más contratos para asumir el trabajo; su vida fue un ejemplo de dedicación y amor a lo que hacía, viajaba por todo el mundo, conocía todo sobre el aceite y le apasionaba lo que hacía", señaló un colaborador del empresario.