Con sus violentos tocamientos, Josué Barrul Suárez quería violar a una mujer estadounidense que había acudido a Xinzo para cooperar con una oenegé local y estaba haciendo deporte junto al río, el 27 de septiembre de 2016. La Sala de lo Civil y Penal del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) da la razón a la acusación particular y corrige a la Audiencia Provincial de Ourense, que en junio de este año había impuesto dos años de cárcel al individuo. El alto tribunal gallego sostiene que el hombre intentó violarla, no solo hacer tocamientos, por lo que lo condena a tres años y medio de cárcel.

"Claro está que el acusado realizó varios actos violentos contra la víctima, al tiempo que le tocaba pechos y piernas, pero, además, y muy decisivamente, es innegable que dio principio a la ejecución del acceso carnal al bajar hasta las rodillas las mallas que llevaba puestas", según el Tribunal Superior. Tras analizar los hechos probados en la sentencia, el alto tribunal gallego considera que lo "lógico y racional" es "inferir que el acusado pretendía penetrar a la víctima, bien fuese vía vaginal, bien mediante la introducción de miembros corporales como las manos".

Falló el protocolo de víctimas

Además de la propia gravedad del delito, este caso sacó a la luz un fallo en la atención a una víctima extranjera. Según trascendió en el juicio, en el centro médico le advirtieron que el informe de lesiones y la asistencia no serían gratuitos, sino que recibiría una factura de unos 200 euros. El Sergas afirma que no se niega la asistencia a nadie y que, en todo caso, la facturación a personas no cubiertas por ningún convenio es posterior. La Audiencia Provincial dijo que "lamentablemente no se activó el correspondiente protocolo previsto para esta clase de delitos. El mismo día y tras denunciar los hechos, los agentes de la Guardia Civil acompañaron a la denunciante al correspondiente centro sanitario del Sergas, donde le fue denegada la asistencia gratuita aduciendo que era extranjera y su seguro no tenía cobertura pública, desplazándose entonces a una clínica privada".