Una defensa en clave de futuro del actual proyecto de estación intermodal de la ciudad fue el que hizo ayer el alcalde, Jesús Vázquez, que además, dijo, está avalado por el actual Gobierno central del Partido Socialista. Pero realizó a la vez una advertencia sobre las alegaciones que presentaron dos exalcaldes socialistas y ediles que formaron parte de esos gobiernos en el anterior mandato, en el sentido de que "los líos internos" el PSOE ourensano pretenden "bloquear" una inversión de unos 150 millones de euros.

Para Vázquez "esos líos" entre los socialistas "no favorecen a los ourensanos" y señaló que "lo único que hacen es evidenciar diferencias muy grandes" y poner de manifiesto que "existen manos negras que mandan ciertos mensajes", cuando la realidad es que hay un "proyecto por delante, con un futuro para la ciudad", por lo que considera que "tenemos que pensar en construir".

Eso lleva al regidor a esgrimir como un argumento de peso, y que pone de manifiesto las contradicciones que existen dentro del PSOE, al estudio informativo publicado por el Gobierno central que avala el actual proyecto como la mejor "posibilidad" que tiene la ciudad. Además de defender la actuación que se llevó a cabo por el actual equipo de gobierno, debido a que "se tuvo que empezar de cero en 2015, debido al enfrentamiento que había entre el anterior gobierno socialista en la ciudad con el ejecutivo central".

Avanzar

Pero en lo que hizo especial hincapié el regidor es en que todo lo que se hizo hasta este momento tuvo como objetivo "avanzar" y poder conseguir el mejor proyecto posible para la que será futura estación intermodal del AVE y el entramado de vías. Para recalcar que las alegaciones presentadas por el gobierno municipal, reclamando la inclusión de algo más de 27 millones de euros que no aparecen, forman parte de la inversión comprometida y reflejada en los acuerdos adoptados.

"Nosotros defendemos los intereses de la ciudad y no bloquear inversiones de 150 millones que es lo que pretenden otros", indicó Jesús Vázquez en alusión directa a las alegaciones que presentaron los exdirigentes socialistas.

Es por eso que invitó al resto de grupos políticos a trabajar "en defensa de los intereses de la ciudad" y no con el objetivo de "bloquear" el proyecto actual, que confía en que no sufra nuevos retrasos tras la presentación de alegaciones.

Lo que tiene claro el alcalde es que esas alegaciones que presentaron los socialistas puedan llevar consigo retrasos en el proyecto, y que "los que tienen que dar respuesta a esas alegaciones son los técnicos".