El declive demográfico que sufre con especial dureza la provincia de Ourense tiene su reflejo en el mercado laboral, que perdió un 10% de su población activa en la última década: 14.500 activos menos en diez años y la tasa de actividad más baja del Estado.

En Ourense, el 48,1% de la población mayor de 16 años está ocupada o buscando trabajo y el 51,9%, es decir, más de la mitad, se encuentran en situación de inactividad. Esta distribución porcentual se traduce en 130.200 activos frente a 140.500 inactivos en la actualidad de una población total de 270.700 personas mayores de 16 años. El colectivo de inactivos está formado mayoritariamente por jubilados o pensionistas (90.400), pero también incluye a los estudiantes (14.400), las personas incorporadas a las labores del hogar (21.100) y los incapacitados permanentes (12.100), entre otros (2.500).

La provincia de Ourense se mantiene así como la única de España en la que hay más población inactiva que activa y la segunda con la tasa de empleo más baja, con un 41,24%. Sólo la ciudad autónoma de Ceuta registra peores datos.

Así lo reflejan las cifras difundidas ayer por el Instituto Nacional de Estadística, INE, con motivo de la Encuesta de Población Activa, EPA, correspondiente al tercer trimestre del año. Los meses del verano y las contrataciones estacionales, a diferencia de lo ocurrido en Galicia, no lograron reducir el paro, que suma en Ourense 1.100 desempleados más a cierre de septiembre y se sitúa en 18.600. La cifra de ocupados perdió 1.900 trabajadores al pasar de 113.500 en el segundo trimestre a 111.600.

La tasa de ocupación se sitúa según la última EPA en un 85,8% y la de paro en 14,3, un dato todavía alejado de los niveles anteriores a la crisis económica (5,35% en el tercer trimestre de 2008) y tres puntos por encima todavía del año 2009, cuando se empezaron a notar los efectos de la recesión en el mercado de trabajo de Ourense.

En la comparativa con el mismo período del pasado año, la situación mejora, ya que entonces había 20.000 parados y 110.600 personas trabajando.

El envejecimiento y la pérdida gradual de población en Ourense no se puede quedar al margen del análisis de la EPA ya que afecta notablemente al mercado de trabajo. Un ejemplo es la drástica reducción de la población activa en el sector de la agricultura, reflejo del abandono del rural y la pérdida de peso del sector primario en la provincia. Hace diez años había en Ourense 12.600 personas en edad laboral con empleo o esperando uno en el sector de la agricultura. Según la EPA publicada ayer, en el tercer trimestre de este año eran 6.300, justo la mitad.

Ningún otro sector de producción ha sufrido una pérdida tan importante de activos, aunque en todos se ha producido un importante retroceso. El 66% de la población activa de Ourense está registrada en la actualidad en el sector servicios, que es el que menos activos ha perdido en la última década: de 89.100 en 2008 a 85.600 en 2018.

En la industria concentra el 14,5% de los activos en Ourense y se ha visto muy perjudicada tanto por caída demográfica como por la pérdida de puestos de trabajo a causa de la crisis económica. Hace diez años había 26.600 personas con capacidad para trabajar en este sector frente a las 18.800 del tercer trimestre de este año.

La construcción cuenta con 9.100 activos en la actualidad, 4.300 menos que hace una década. Este sector representa el 7% de la población activa en la provincia y experimenta una notable recuperación tras la caída a causa de la crisis del ladrillo. De hecho, es el sector que más ha crecido en el último año tras pasar de 6.900 activos a 9.100, lo que supone un incremento del 24%, frente a subidas inferiores del 0,5 y el 2% en servicios e industria, respectivamente. La agricultura cayó 4,5% en el último año.

También se ha reducido considerablemente el colectivo de personas que buscan su primer empleo o que han dejado su último trabajo hace más de un año. Según la EPA del tercer trimestre son 10.400 personas las que se encuentran actualmente en esta situación, frente a las 13.600 de hace un año. Este colectivo, que hace una década apenas alcanzaba los tres mil afectados, supera hoy en número a la población activa en agricultura (6.300) y en el sector de la construcción (9.100).

A pesar de que las mujeres aventajan a los hombres en el conjunto que conforma la población de mayores de 16 años, con 142.100 mujeres frente a 131.000 hombres, la población activa es mayoritariamente masculina: 68.300 hombres y 62.200 mujeres. También es mayor la ocupación en el caso de los trabajadores varones, con 59.500 trabajadores frente a 51.100 trabajadoras ocupadas. Las mujeres ganan cuando se habla de desempleo (11.100 paradas frente a 8.900 parados) y de inactividad (79.900 inactivas frente a 62.700 inactivos).